El helado es un clásico postre frío que por lo general se hace a base de lácteos, a menudo en combinación con frutas y diversos ingredientes. Generalmente se endulza con azúcar, también puede llevar saborizantes, edulcorantes o miel.
Sus combinaciones son múltiples y existen sabores para todos los gustos. Es ideal para el verano, pero también sienta bien en cualquier estación. En esta ocasión te recomendamos uno que lleva vino tinto, una opción tan novedosa como deliciosa.
El helado es un clásico postre frío que por lo general se hace a base de lácteos, a menudo en combinación con frutas y diversos ingredientes. Generalmente se endulza con azúcar, también puede llevar saborizantes, edulcorantes o miel.
Sus combinaciones son múltiples y existen sabores para todos los gustos. Es ideal para el verano, pero también sienta bien en cualquier estación. En esta ocasión te recomendamos uno que lleva vino tinto, una opción tan novedosa como deliciosa.
Cómo preparar el helado de vino tinto
1. Colocar los frutos rojos congelados, el azúcar, el vino, la albahaca y el hielo en una licuadora. Mezclar hasta obtener una consistencia integrada.
2. Verter la mezcla de los ingredientes en un recipiente de vidrio o cerámica. Cubrirlo con papel de film transparente.
3. Guardar el recipiente con la mezcla en el freezer. Hay que calcular que no se endurezca de más a la hora de servir. Sino, habrá que dejarlo descongelar hasta que esté apto para consumir, como todo helado.
4. Decorar con unas hojas de albahaca para la presentación. Se puede tomar con cuchara o con un sorbete, dependiendo del tiempo que haya estado descongelándose. ¡A disfrutar!
