Actualmente, no es un secreto que las redes sociales en muchas ocasiones se han utilizado como una plataforma desde la cual promover mensajes de discriminación, odio y violencia.

Estas situaciones que se repiten, no sólo en el fútbol inglés, podrían sentar un precedente, y es de estacar que en lugares como Alemania y Australia, la aparición de mensajes de odio en una red social no solo es rechazada sino que acarrea sanciones para la misma.

En Inglaterra, esta reunión llega después de un encuentro previo que mantuvieron los clubes con responsables de Twitter, a raíz de los insultos racistas que futbolistas como Tammy Abraham y Paul Pogba han recibido en las últimas semanas, según consigno la Agencia EFE.

Pogba tuvo que hacer frente a las ofensas racistas en Twitter después de errar un penal contra el Wolverhampton Wanderers, en el partido que terminó 1-1. Lo mismo le pasó a Abraham, aunque en su caso por fallar el tiro decisivo en la definición por penales que le dio la Supercopa de Europa a Liverpool frente a su equipo, el Chelsea, en agosto pasado.

“La reunión ha sido productiva y positiva y nos ha dado la oportunidad, tanto a las autoridades como a Twitter de examinar algunos de los problemas específicos alrededor de este inaceptable comportamiento”, explicó la Premier en un comunicado.

Según explicaron en la nota, todas las partes implicadas en el problema han aceptado continuar con las conversaciones en el futuro para acabar con este problema.