La japonesa Naomi Osaka, número 3 del mundo, conquistó este sábado el Abierto de Australia al derrotar a la estadounidense Jennifer Brady (24ª) 6-4, 6-3, logrando de esa manera, a sus 23 años, un cuarto título de Grand Slam en otras tantas finales disputadas.
Osaka, que sólo vivió ciertos momentos de duda en la segunda mitad del primer set, no le dio opciones a Brady.
Sin jugar su mejor tenis, la tenista demostró estar varios escalones por encima de su rival. Mientras que, en su enfrentamiento precedente, en semifinales del último US Open, Osaka se impuso en un partido disputado 7-6, 3-6, 6-3, la final de este sábado fue de sentido único.
Por su parte, la final masculina la jugarán este domingo desde las 5.30 (hora de la Argentina) el serbio Novak Djokovic (1), ocho veces campeón en Australia, las dos últimas en forma consecutiva, y el ruso Daniil Medvedev (4).