[vc_row][vc_column][vc_column_text]Lo dijo Pablo Pérez, el capitán de Boca que sufrió una lesión ocular al estallar un vidrio del micro que lo transportaba al estadio Monumental, para la segunda final de la Copa Libertadores 2018, que está suspendida y sin fecha tras los incidentes.[/vc_column_text][vc_media_grid element_width=”6″ grid_id=”vc_gid:1543273557168-9a54b4c9-fbe9-4″ include=”211881,211880″][vc_column_text]CAPITAL FEDERAL. El capitán el equipo de Boca, Pablo Pérez contó el miedo que sintió tras el ataque al micro en la previa a la segunda final de la Copa Libertadores de América 2018, ante River -incidente que derivó en la suspensión del partido- y reveló una intimidad familiar. “¿Qué pasaba si jugábamos y ganábamos en su cancha? Me matan. Tengo mi esposa, tres hijas. La mayor me abrazó cuando llegue a casa y estaba llorando”, aseguró.
A la salida del Sanatorio Otamendi, Pablo Pérez no ocultó su tristeza tras el ataque al micro de Boca y la bochornosa suspensión de la súper final de la Libertadores. Luego de ese repudiable episodio, el capitán de Boca sufrió una lesión en su ojo izquierdo que le impidió disputar el encuentro y deberá realizarse nuevos controles. Pero más allá de esta situación, su angustia pasa por algo mucho más importante: el mal momento que tuvo que pasar su familia.
“Es una vergüenza lo que sucedió. Tengo mi señora y tres hijas. La mayor me abrazó cuando llegué a casa y estaba llorando. Uno no puede jugar de esta manera, esto no puede pasar más”, contó. Y luego, Pablo hizo un análisis mucho más profundo al revelar el miedo que sintió al entrar al Monumental.
“No puedo ir a una cancha donde no me brindan seguridad. ¿Qué pasaba si jugábamos y ganábamos? ¿Quién me saca de ahí? Si la gente estaba loca antes de entrar, imaginate si les dábamos la vuelta en su estadio. ¡Me matan! No voy a jugar en una cancha donde puedo morir”, sentenció el capitán Xeneize.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]
Olé
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