El creador de Vikings explica la muerte de Heahmund

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Michael Hirst brindó su punto de vista sobre la muerte de un querido personaje de la serie, interpretado por Jonathan Rhys Meyers, en el capítulo 15 de la quinta temporada.[/vc_column_text][vc_media_grid grid_id=”vc_gid:1546042522452-8ed9a4aa-e331-10″ include=”218006,218007,218008″][vc_column_text]El miércoles pasado (26/12), se estrenó “Hell”, el quinto episodio de la segunda parte de la quinta temporada de Vikings mediante el cual la serie volvió a quebrar el corazón de algún que otro fan tras la sorpresiva muerte de Bishop Heahmund, el personaje que Jonathan Rhys Meyers interpreta desde el final de cuarta entrega de la tira y que se había ganado el cariño de varios televidentes gracias a su relación con Lagertha (Katheryn Winnick) y su alianza con Ivar (Alex Høgh Andersen).

Como no podía ser de otra manera, el inesperado suceso fue un movimiento más que pensado por el creador, escritor y productor de la serie, Michael Hirst, y todo su equipo, así que en un intento por llevar claridad a los seguidores de este producto de History Channel, el inglés salió a fundamentar su decisión.

En un diálogo con Variety, Hirst remarcó que es importante lo que se aprende de los últimos momentos de Heahmund con vida: “Él fue a la batalla casi queriendo morir, limpio… Y, aún así… No sé si se percibirá, pero sus últimas palabras son que ama a Lagertha. Así que, de hecho, se condena a sí mismo al final. Eso fue algo bueno para mí, porque nos recuerda que el amor es lo más importante”, opinó.

Además, el nacido en el condado de West Yorkshire recalcó que, debido a su personalidad, el personaje no estaba destinado a vivir demasiado tiempo en la historia: “Heahmund es un personaje tan extremo que tenía que morir y debía hacerlo de forma heroica en una batalla. Es el tipo de personaje que sencillamente no está interesado en la supervivencia”, comentó.

“Tiene una presencia extraordinaria e incluso recuerda un poco a personajes como Ricardo I de Inglaterra, quien tampoco podría haber muerto en su cama. Los guerreros de esa clase y pasión son tan extremos que tendrían que quemarse en el campo de batalla. Es como un cohete que sube y es brillante e ilumina todo por un tiempo, pero luego tiene que morir y vuelve rápidamente a la oscuridad”, finalizó Hirst.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]