Ocho recetas de ensalada de papas tan fáciles como deliciosas
Características de una buena guarnición
Pueden servirse crudas (por ejemplo, las ensaladas) o también pueden ser cocinadas (como el arroz, preparados de frijol, los purés, huevo o los distintos tipos de pasta).
Es importante que vayan de acuerdo con el elemento principal, es decir, el platillo central. Además, el este puede ir acompañado de 1 a 3 guarniciones, las cuales se recomiendan que también combinen entre ellas y sean variadas (pasta, ensalada y puré, por ejemplo).
Los sabores de las guarniciones también pueden ser variados: una ensalada puede tener elementos dulces, como arándanos, pero componerse principalmente de una hortaliza verde, un cereal o verdura, y venir acompañada de una guarnición más salada.
También pueden ser frescas (como las ensaladas o ciertos tipos de pastas) o tibias (como los macarrones o purés). Se recomienda que al menos una de las guarniciones sea fresca.
Expertos sugieren que por ración se sirvan 3 guarniciones que no sobrepasen los 200 g de peso en conjunto por plato (esta cantidad puede variar dependiendo la edad y el gusto de la persona).
Existen dos tipos de guarniciones: simples, formadas por un solo elemento (las papas en sus diferentes formas o el arroz blanco); y las compuestas, que cuentan con varios elementos (las ensaladas o las pastas).
Fuente Cocina Fácil
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