
El lugar es conocido en todo el mundo por albergar estacionalmente a tortugas oliváceas o golfinas (Lepidochelys olivacea), que llegan a la costa a lo largo de la bahía de Bengala para anidar. Sin embargo, esta primavera fue la primera en siete años que la anidación masiva de la especie tuvo lugar durante el día.
Por la cuarentena, se redujo la interferencia humana en el sitio de anidación, indican medios locales.