Esta raíz, que muchas personas usan como ingrediente culinario, es un aliado fundamental para la salud por su gran densidad de nutrientes. Salvo en el caso de hipertensión, embarazo o fiebre.
Por otro lado, esta raíz también es un potente refuerzo de inmunidad, ya que su compuesto activo gingerol, responsable principal de su sabor, tiene muchísimas propiedades como antibacteriano , antiinflamatorio, analgésico y antioxidante.
El origen
El jengibre se cultiva principalmente en China, en donde la utilizan como un infaltable ingrediente gastronómico, al igual que en India.
Los romanos la importaron de China y desde ese momento fue catalogada como una especia culinaria y medicinal.
Usos culinarios
Esta raíz se utiliza frecuentemente en la cocina Asiática. Los talles se usan en diferentes platos, o bien conservarse en vinagre, y consumirse como aperitivo.
Además, el sabor picante hace que el jugo del rizoma se use como condimento en el marisco y el cordero en la cocina china.
Por otro lado, en el caso de Occidente, el jengibre se emplea seco o en polvo para aderezar platos dulces.
Puede encontrarse en caramelos, o en algunos tipos de galletas.
Planta medicinal
La medicina tradicional China, descubrió que sus propiedades sirven como estimulante gastrointestinal, tónico y expectorante.
Investigaciones científicas determinaron que, el jengibre es útil en:
- Vómitos tras la realización de una intervención quirúrgica.
- Dolor menstrual.
- Artrosis.
- Migrañas (dolor intenso de cabeza).
- Artritis reumatoide.
Riesgos en su consumo
Para aquellas personas que sufran de diarrea, molestias de estómago, acidez y un aumento del sangrado durante la menstruación, su consumo podría tener efectos secundarios.
Además los pacientes con diabetes, y pacientes con afecciones cardíacas, deben prestar especial atención antes de tomar jengibre y acudir al médico para que le asesore antes de ingerirlo.