La mañana del sábado 26 de febrero, Venus se apreciará muy brillante por encima del planeta rojo antes del amanecer, mientras que nuestro satélite natural aparecerá a la derecha de estos.

Este fenómeno poco usual podrá ser observado desde el hemisferio norte sin la necesidad de utilizar telescopios, de acuerdo al sitio especializado Earth Sky.

El espectáculo concluirá el domingo 27, cuando la Luna menguante, que se espera tenga un 14 % de iluminación, se posicione antes del amanecer unos 3,5º por debajo de Marte, que estará 4º por debajo de Venus, completando así la conjunción de los tres mayores cuerpos celestes cercanos a la Tierra.

Aproximadamente 30 minutos después del amanecer, bajo las condiciones meteorológicas adecuadas, también se podrá observar a Saturno y Mercurio alineados, aunque considerablemente más tenues, en la parte inferior izquierda del trío.