Tatuajes en verano, un arte que exige precauciones
Lourdes Cabral, tatuadora con años de experiencia, sostiene que, pese a la crisis económica, la demanda por tatuajes sigue siendo alta, especialmente durante la temporada de verano, cuando muchas personas buscan nuevos diseños para lucir durante sus vacaciones. “Es la temporada más alta, donde la gente quiere empezar a lucir, se van de vacaciones y piden turnos todo el tiempo”, explica Cabral.
Sin embargo, la tatuadora también señala que el verano no es la mejor época para realizarse un tatuaje debido a la exposición intensa al sol y el calor. “En invierno es cuando mejor se cura el tatuaje. La piel está tapada, no hay exposición al sol, y el tatuaje se cura bien durante un mes”, afirma Lourdes. En cambio, en verano, las personas suelen estar más expuestas al sol, al agua de piletas y ríos, lo que complica el proceso de curación. “Un tatuaje recién hecho puede infectarse si entra en contacto con el agua de una pileta o un río”, advierte.
La tatuadora señala que, en estas condiciones, tanto el cliente como el tatuador enfrentan riesgos. “Es un problema para el tatuador y para el cliente, porque se corre el riesgo de que el tatuaje no cicatrice correctamente, lo que puede generar complicaciones en la piel”, menciona Cabral.
Para aquellos que deciden tatuarse en verano, la tatuadora ofrece una serie de recomendaciones: “Es fundamental cuidarse del sol, mantener el film protector puesto sobre el tatuaje y usar crema hidratante. Además, es importante limpiarlo con jabón neutro y evitar el contacto con el agua de piletas, ríos y evitar el exceso de ejercicio para no lastimarse la zona”.
En cuanto a los precios, Cabral comenta que, a pesar de los altibajos económicos, los costos se han mantenido relativamente estables en los últimos meses. “Los últimos tres meses han sido estables, no ha habido aumento. El costo mínimo de un tatuaje es de 15 mil pesos en adelante, dependiendo del tamaño, la zona o los colores”, explica la tatuadora. El costo también varía según el artista y los insumos que utilice para cada trabajo.
Con el paso de los meses, Cabral subraya que los precios no han cambiado considerablemente, lo que permite una cierta estabilidad en el sector, a pesar de las dificultades económicas que afectan a muchas actividades.