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Universidades utilizan mesas virtuales para hacer autopsias

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Dos universidades argentinas incorporaron “mesas virtuales” de anatomía que permiten que los estudiantes de medicina realicen disecciones y autopsias sobre cuerpos digitalizados, en base a estudios clínicos reales.

Universidades utilizan mesas virtuales para hacer autopsias

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Dos universidades argentinas incorporaron “mesas virtuales” de anatomía que permiten que los estudiantes de medicina realicen disecciones y autopsias sobre cuerpos digitalizados, en base a estudios clínicos reales.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=”170873″ img_size=”full” alignment=”center”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Estos dispositivos, también, brindan la posibilidad de estudiar cada parte del cuerpo de manera minuciosa, compartir conocimientos con otras casas de estudios del mundo e imprimir órganos en 3D.

Télam participó de una clase de Anatomía en la facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Católica Argentina (UCA) y pudo ver en vivo cómo funciona la Mesa Sectra, una tecnología sueca que también incorporó la Universidad Nacional del Nordeste (NNE), con sede en Corrientes.

La mesa puede usarse de manera horizontal, a modo de camilla, o vertical. En la pantalla de 55 pulgadas se ve un cuerpo real, un cadáver que fue escaneado y luego cortado para poder ver cada parte, gracias a la tecnología, en diferentes planos.

“Se puede recorrer de manera táctil cada corte, cada órgano. Colorearlos, quitar algunos o agregar otros. Aumentarlos, disminuirlos. Medirlos. Así se pueden ver los órganos en diferentes espacios: anterior, posterior, superior, inferior y jugar con los planos del reconocimiento”, explicó el médico Gustavo Bondulich, docente de Anatomía en la UCA, mientras mostraba el funcionamiento de la mesa.

Tocando la pantalla se puede ‘teñir’ una estructura, por ejemplo, el músculo exterior del pectoral que está en la región anterior del tórax. Lo coloreado va recorriendo distintas partes del cuerpos para ver cómo ese músculo se ubica en el organismo, color que no aparece en la parte del cuerpo donde el músculo no está. Y el docente pregunta a los alumnos: “¿Qué músculo marqué?”.

Gracias a un icono que simula un bisturí se puede hacer una disección, para eso “se agranda en la pantalla la imagen, en este caso, del pectoral mayor y se opera para ir viendo desde superficie a profundidad cómo es esa estructura corporal. Sacamos el esternón, las costillas, el manubrio esternal, los pulmones, los músculos intercostales, cartílagos y aparecen la estructuras profundas, entre ellas, el corazón”, detalló el doctor.

Así funciona

El sistema permite elegir por regiones, sistemas y tejidos humanos, los cuerpos con los que se puede trabajar virtualmente son de hombre y de mujer y permite hacer simulaciones quirúrgicas.

“Los alumnos podrán acceder al dispositivo ‘madre’ -la mesa-desde sus computadoras y los docentes les podrán preparar un programa para seguir la mesa e interactuar desde sus portátiles. Incluso se pueden imprimir órganos en 3D”, aporta Miguel Ángel Schiavone, decano de Medicina de la UCA.

En la UNNE de Corrientes, la mesa “se utiliza en cátedras como Anatomía e Imagenología, es decir, diagnóstico por imágenes, pero también para Anatomía Patológica”, explicó a Télam, Omar Larrosa, decano de la universidad, que remarcó que su alcance “es hasta nivel celular y con capacidad para la reconstrucción de porciones dañadas del cuerpo”.

Para el directivo el uso de esta tecnología “posibilita disminuir el uso de cadáveres en el estudio de la medicina, con el beneficio de bajar costos de conservación y de mitigar el impacto que tiene el formol en la manipulación de los cuerpos”.

También en la UCA se acercan a esta tendencia: “Queremos desarrollar la anatomía desde la vida. Por supuesto que la enseñanza que nos ha transmitido el cadáver para entender la anatomía es incalculable y en la clase seguimos usando elementos humanos, pero esta enseñanza desde la vida nos motivó a generar nuevas pedagogías y nuevas enseñanzas desde lo tecnológico”, definió Bondulich.

“Antes era el pobre paciente el que resistía el aprendizaje de médicos en formación o de los estudiantes avanzados y hoy nosotros somos como un piloto de avión que necesita sus horas de vuelo y sus prácticas en simuladores. Está pasando lo mismo en la medicina”, agregó.

La posibilidad de imprimir órganos en 3D tiene tiene un avance significativo en la Facultad de Medicina de la Universidad de La Plata que es la sede de la Cátedra de Anatomía Digital de la Unesco y cuenta desde el año pasado en un laboratorio donde imprimen órganos, músculos, huesos y circuitos arteriales.

La Mesa Sectra tiene además un portal donde las universidades que cuentan con el dispositivo comparten casos clínicos.

El rector de la UNNE contó que están “comprando la segunda mesa y tenemos pedidos de Entre Ríos y Santiago del Estero para la capacitación en su uso”.

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