La fecha figura en la hoja de ruta elaborada por la Cancillería a partir de la ronda de conversaciones que Merkel y su equipo han mantenido con los Länder y con el comité técnico que sigue la pandemia como preparatoria de la videoconferencia que hoy mantendrá a partir de las 14:00 con los primeros ministros regionales para decidir en qué momento se ha de proceder a la salida. Las medidas de contención de la pandemia van inicialmente hasta el 19 de este mes.
Según la agencia alemana Dpa, la hoja de ruta que Merkel discutirá primero con los miembros del gabinete del coronavirus, en el que participan los ministros de Interior, Horst Seehofer, y de Sanidad, Jens Spahn, y después con los “Länder” prevé una salida escalonada a la normalidad, pero con fuertes restricciones.
La canciller intentará de esa manera responder a las demandas de los estados federados, que piden volver a la normalidad lo antes posible, entre ellos Renania del Norte Westfalia, con las reservas de otros territorios, especialmente Baviera, e incluso de los expertos del instituto Robert Koch (RKI), que consideran prematuro levantar las restricciones. Las discrepancias son tan notorias que Merkel deberá emplearse a fondo para lograr un consenso.
La canciller tiene dos informes científicos y contradictorios sobre la mesa. El RKI, centro nacional de referencia en epidemiología, apuesta por mantener las medidas de contención en tanto que no se ha doblegado la curva de contagios. El otro ha sido elaborado por la Academia Nacional de Ciencias (Leopoldina) y aboga por el levantamiento paulatino de las restricciones dado que la lucha contra la pandemia evoluciona a la baja. Como primer paso sugieren la reapertura de los colegios y el uso masivo de mascarillas. El informe de Leopoldina, de 12 páginas, es el que utiliza como referencia el primer ministro renano, Armin Laschet, para volver a la normalidad. El presidente del RKI, Lothar Wieler, se ha referido a este informe como “uno entre otros”.
Alemania ha computado en las últimas 24 horas 2.486 nuevos contagios, con lo que el total de infectados registrados se sitúa en las 127.584 personas. La tasa de crecimiento es del 1,3%, tres décimas por encima de lo que el RKI considera razonable. Por comparación, Austria inició ayer la salida con una tasa de contagios del 0,8%.
Por su parte, la cifra de muertos por la COVID-19 se eleva a 3.254 tras un incremento diario de 285. Los recuperados son ya en torno a 72.600, con el alta de unos 4.500 pacientes en las últimas 24 horas. Con estos datos en la mano, Alemania es el cuarto país del mundo con más casos de coronavirus, tras Estados Unidos, España e Italia.
Merkel, que ejerce en la crisis del coronavirus un papel de coordinación porque las restricciones son competencia de los “Länder”, ha pedido en repetidas ocasiones “paciencia” y “disciplina”, y evitado definir un marco temporal concreto para la retirada de las medidas extraordinarias. La presión en un sentido y otro, también por parte de los sectores económicos, es enorme. La canciller tiene de su lado a la mayoría de la población. Según una encuesta reciente de la televisión pública ARD, el 64% de los ciudadanos valora positivamente la gestión del Gobierno en la crisis.
EMO
