El Gobierno de Emmanuel Macron cumplirá en la recta final de su mandato una de las promesas que hizo durante su campaña electoral: equiparar a los padres en las responsabilidades respecto a la crianza de sus hijos recién nacidos. De esa manera, se ampliará la baja paternal de 14 a 28 días.

Para evitar que, como hasta ahora, se produzca una desigualdad que hace que los padres con un contrato estable elijan mayoritariamente por el permiso y aquellos en situación laboral más precaria acorten el mismo, se establecerá una parte obligatoria en el nuevo permiso -a acordar entre patronal y sindicatos-. Las empresas que se nieguen a otorgarlo podrán recibir multas de hasta 7.500 euros.

Esa reforma se incluirá en el Proyecto de Financiación de la Seguridad Social y, una vez que se apruebe, debería entrar en vigor en julio de 2021.