Al menos 19 personas murieron desde que comenzó la temporada de incendios en Australia, en el mes de septiembre. Esta cifra podría aumentar, ya que las autoridades del estado de Victoria afirmaron que 17 personas están desaparecidas.
Daniel Andrews, el primer ministro del Estado de Victoria, ubicado en el sureste de Australia, declaró por primera vez en la historia el estado de desastre en gran parte de la mitad oriental de la región, lo cual prevé “la evacuación formal de localidades y zonas”.
El incendio ya dejó más de cinco millones de hectáreas quemadas. Además, el gobierno confirmó que 500 millones de animales murieron por el fuego y que hay más de mil casas incendiadas.
A esto se suma el pronóstico, que anuncia la llegada de un nuevo frente cálido y amenaza con extender aún más las llamas. También se prevén temperaturas superiores a los 40 grados.