Tres jóvenes fueron rescatados con vida tras 198 horas atrapados bajo los escombros de edificios de las ciudades de Kahramanmarash y Adiyaman, en Turquía, que fueron derrumbados por los fuertes terremotos que sacudieron el sureste de Turquía y el norte de Siria la semana pasada.
Los canales de televisión retransmitieron en directo el rescate en Kahramanmarash de los hermanos Muhammed Enes y Abdulbaki Yeniar, de 17 y 20 años, respectivamente, quienes fueron enviados a hospitales con heridas de diverso grado.
Posteriormente, lograron también sacar de entre los escombros a Muhammed Cafer Çetin, de 18 años, en la ciudad de Adiyaman, tras haberlo contactado previamente y constatado que se encontraba bien y podía hablar.
Estos sucesos se consideran un “milagro”, porque se producen nueve días después de que miles de edificios colapsaran en diez provincias de Turquía, donde en los primeros días han sido salvadas más de 80.000 personas heridas.
A esos rescates se le suma el ocurrido este fin de semana: en la provincia de Hatay, un bebé de dos meses que pasó 128 horas bajo los escombros fue salvado. En esa ciudad también salvaron a una nena de 3 años.
291 niños no acompañados
“Actualmente tenemos registrados 1.362 niños no acompañados. De ellos, 369 fueron identificados por sus familias y entregados a las mismas”, declaró además la ministra de Familia y Servicios Sociales, Derya Yanik.
Y añadigregó que 792 menores están siendo atendidos en diversos hospitales, mientras que otros 201 han sido alojados en instituciones de su ministerio: “Hemos identificado las identidades de 1.071 de estos niños. Aún no se ha determinado la identidad de 291″, precisó.
Los terremotos de 7,7 y 7,6 grados de magnitud que azotaron a Turquía y Siria el pasado día 6 han causado más de 35.000 muertos y más de 80.000 heridos, lo que los convierte en los más letales de la región en más de un siglo.
