Cualquier objeto que perteneciera a Diana de Gales es hoy un auténtico tesoro capaz de alcanzar altos precios en las subastas. 

Recientemente, un auto Ford Escort modelo 1981 que perteneció a la princesa Diana de Gales fue vendido este martes en una subasta celebrada en la ciudad británica de Colchester, a un museo de Sudamérica por 52.640 libras esterlinas (unos 72.800 dólares), según informó el diario Independent.

Ese automóvil fue un regalo de compromiso hecho en mayo de 1981 por el príncipe Carlos a la madre de sus hijos. Diana dejó de usar el Ford Escort después de dar a luz al príncipe Guillermo en 1982 y luego el vehículo fue comprado por un anticuario. 

Desde el año 2000, el coche pertenecía a una admiradora de la familia real británica. El precio inicial de remate del Ford Escort era de 47.000 libras esterlinas (casi 65.000 dólares).

El coche se mantuvo en perfecto estado hasta ahora, 40 años después de que Diana lo estrenara, en manos de una admiradora que ha mantenido su propiedad en secreto y se encargó de su mantenimiento.

Además de conducirlo por Londres, Diana solía llevarlo a los partidos de polo de Carlos, y los veía sentada en él.