Este jueves, Jerusalén amaneció cubierta de una capa de más de quince centímetros de nieve tras una intensa nevada durante la noche, provocada por el temporal Elpida, que obligó a cortar casi todos los accesos a la ciudad y suspender gran parte del transporte público.
La nieve comenzó a caer el miércoles a las 19.30 hora local (17.30 GMT) y las autoridades habían aconsejado a los residentes en la ciudad que permanecieran en sus casas desde las 15.00 hora local (13.00 GMT). Además, por la tarde, tuvieron que suspender la actividad en colegios y organismos públicos.
Los servicios municipales trabajaron durante la noche para limpiar de nieve las principales calles de la ciudad, con 250 quitanieves desplegados y unas 150 toneladas de sal esparcidas por las carreteras.