BUENOS AIRES. En la tarde de ayer jueves, tras la apelación de la fiscal Silvana Russi y la presentación de la víctima como querellante, la jueza Karina Zucconi procesó a Irineo Garzón, el hombre acusado de drogar y violar a una joven de 18 años en su local comercial.

La decisión de dejar en libertad al agresor generó mucho repudio de la sociedad, ya que el hombre fue encontrado junto a la víctima por la Policía de la Ciudad. La joven se encontraba balbuceando en un estado de llanto, con sus pantalones desabotonados y, como si esto fuera poco, en el local se encontró la medicación analgésica que Garzón habría usado para cometer el horrible acto.

Zucconi, al tomar la decisión de dejarlo en libertad, tampoco tuvo en cuenta los diversos chats que muestran un fallido intento de seducción y una pericia, que demostró que la joven tenía tres lesiones sangrantes compatibles con un abuso. Todos esto no fue suficiente y, pese al riesgo de fuga y de entorpecer la investigación, la jueza benefició al hombre con una fianza bajo palabra a pesar de las fuertes pruebas en su contra.

La fiscalía que interviene en el caso apeló la excarcelación del acusado y exigió que se lo vuelvan a detener.

Sin embargo, tras la presión, Zucconi decidió procesarlo. No obstante, Garzón mantendrá su libertad, atado a las reglas impuestas en la decisión tomada el lunes pasado. Esta libertad será apelada tanto por la querella como por fiscalía.