Luego de intensas negociaciones que pusieron en jaque la normalidad de la temporada alta de vuelos, los tres principales gremios de Aerolíneas Argentinas, la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), llegaron a un acuerdo con la empresa que incluye un aumento salarial del 16% y una serie de ajustes en los beneficios laborales.
Uno de los principales cambios, que generó controversia, es la eliminación de los pasajes en clase ejecutiva para los pilotos y sus familias, un beneficio considerado un derecho adquirido. A partir de ahora, tanto los pilotos en actividad como los jubilados perderán esta ventaja, una de las más valoradas dentro del convenio colectivo. Además, se modificará el beneficio de los traslados en remís para los trabajadores, que eran usados para garantizar la llegada a las terminales antes de iniciar la jornada laboral. En su lugar, se implementará un sistema de viáticos, que comenzará a aplicarse una vez finalizada la temporada alta de verano.
El acuerdo también incluye modificaciones que afectan a otros sectores de la empresa. Por ejemplo, se levantó el bloqueo al sistema de autoservicio en las terminales y se flexibilizó la rotación del personal de mecánicos y rampa, quienes ahora podrán ser reubicados según las necesidades operativas de la empresa. Además, se acordó la incorporación de un servicio de venta a bordo de productos, una medida que, según el comunicado de Aerolíneas Argentinas, busca generar nuevas fuentes de ingresos y mejorar la experiencia del pasajero.
Por último, se destacó la implementación de incentivos para aumentar las horas de vuelo de los pilotos y tripulantes, quienes verán reflejados sus esfuerzos en mejores salarios según el tiempo efectivo de operación. Esto, en teoría, busca incrementar la productividad de la aerolínea, informó el portal TN.