Economía

Se espera más inflación con recesión económica, por la escasez de divisas y “el derrumbe de las exportaciones agrícolas”

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Según el economista Santiago Mandukián, de la consultora Ecolatina, es muy lejana la meta del gobierno de una inflación del 3% en abril, porque comenzó a acelerarse la inflación y porque la sequía está provocando una caída dramática en la producción del agro, la principal generadora de divisas en el país. Además, Mandukián alertó sobre los peligros de un dólar diferencial para economías regionales.

Se espera más inflación con recesión económica, por la escasez de divisas y “el derrumbe de las exportaciones agrícolas”

POSADAS. Para el economista de la consultora Ecolatina, Santiago Mandukián, las previsiones para este año indican que la inflación será superior a la del 2022 con el agravante de la desaceleración económica (recesión) y la escasez de divisas para la importación de insumos fabriles, lo que repercutirá en los precios y en la actividad económica.

En diálogo con el programa “Somos Identidad” que se emite por MisionesCuatro, Mandukián anticipó que la inflación que informará el INDEC el próximo martes, estará en línea con el relevamiento mensual del AMBA que hacen con la consultora Ecolatina. “Dimos cuenta de que esa desaceleración de la inflación que se vio a fines del año pasado, encontró su punto de inflexión. En enero y febrero, vemos una nueva aceleración, impulsada por alimentos frescos, frutas y verduras, y sobre todo por la carne, que había venido adormecida el año pasado, por una sobreoferta de carne producto de la sequía”, anticipó el economista.

“Comienza marzo que suele ser problemático para la inflación, porque suele captar incrementos de indumentaria y educación, por el inicio de las clases y por cambio de temporada. Ese objetivo que tenía el gobierno de arrancar abril con una inflación del 3%, lo vemos muy lejano. Es otro desafío del gobierno en un contexto en el que la actividad económica se está enfriando”, describió Mandukián, apuntando también a los efectos de la sequía para la economía del país.

Según el economista, será importante el “impacto histórico de los efectos de la sequía en la cosecha de soja (y otros commodities)”.

Las tres debilidades de los acuerdos de precios

Consultado por este medio, Mandukián se refirió a algunos de los problemas de los controles de precios que impone el gobierno a través del programa Precios Justos. “Suelen ser soluciones de corto plazo. Las empresas (que integran Precios Justos) mientras están en el congelamiento, sus costos siguen aumentando. El dólar para importar viene subiendo a un 6% mensual, salarios y tarifas también suben. Entonces cuando terminan esos acuerdos las empresas ajustan hacia arriba”, precisó.

De acuerdo con el analista, Precios Justos presenta “tres debilidades: rige en supermercados e hipermercados, y no en comercios de cercanía, que es donde mayormente compran las personas de los hogares más pobres”, dijo Madukián. “La segunda es que se compone de bienes empaquetados, no incluye las frutas, verduras y carnes. El gobierno quiere lograr acuerdos con estos sectores, pero es muy difícil porque es un conjunto con elevados porcentajes de informalidad, con productores muy dispersos, afectados por ciclos de clima y biológicos”, planteó.

“En tercer lugar, como contraprestación mayor acceso a los dólares para importar. Pero el problema es que esos dólares están escaseando y lo van a seguir haciendo en los próximos meses. Si las empresas ven que esas promesas pueden llegar a incumplirse, se resquebrajan esos acuerdos”, analizó el economista.

Un escenario de alta inflación, con niveles superiores a los del 2022

Respecto de la inflación, con Ecolatina “esperamos una inflación por encima del 100%”, acotó Mandukián.

En esta línea, el referente de Ecolatina explicó que la inflación será elevada en 2023, porque “los ajustes de tarifas van a continuar este año, porque el gobierno tiene compromisos que cumplir y reducir el déficit fiscal. (Entonces) la reducción de subsidios energéticos va a ser relevantes”, sostuvo.

Asimismo, el gobierno “no quiere seguir atrasando el tipo de cambio y que el dólar vaya siguiendo en línea a la inflación y eso te retroalimenta la dinámica de los precios. Y después están los salarios: es un año electoral donde el gobierno convalide que las paritarias sigan a la inflación. Para los trabajadores resguardados (porque están registrados) es una buena noticia. Pero para quienes están afuera (trabajadores informales), es mala, porque tienen menos capacidad para defender el poder adquisitivo”, amplió.

En este punto, Mandukián advirtió que el contexto económico es adverso, porque “la actividad que se enfría, hay inflación elevada y escasez de dólares que va a limitar mucho la operatividad de los dólares. Si Argentina no tiene dólares, la economía no funciona. Y lo que está pasando con el agro es muy dramático. Tenemos una caída que no tiene piso en las proyecciones de cosechas. El panorama climático impide ponerle un piso” al “derrumbe en las exportaciones agrícolas”.

El centro y norte de Santa Fe muy afectado por la sequía. Foto: Radio Gol

Los cinco impactos de la sequía histórica en la economía del país

Al analizar el efecto de la sequía histórica sobre la producción agrícola, el economista explicó: “El agro es el principal generador de divisas en el país y financia el déficit que tienen muchos otros sectores de la economía. Es muy importante el ingreso por el agro, que explica el 60% de todo lo que exportamos”, consignó Mandukián.

Así pues, la sequía y la reducción en las cosechas que aún no se puede cuantificar, provoca “cinco impactos negativos” en la economía, según el experto. “El principal objetivo del gobierno es que no haya un salto abrupto del tipo de cambio, que no haya una devaluación fuerte que acelere los precios y genere una caída en la actividad económica. Esta escasez va a tensionar este objetivo”, planteó el economista.

En segundo lugar “está la escasez de divisas para las importaciones. Y en tercer lugar se va a recaudar menos por derechos de exportación y se va a complicar la meta de ajuste fiscal”, añadió Mandukián.

Por otra parte, el cuarto impacto negativo de la sequía se debe a que la caída en las cosechas, “incide en la actividad económica, en el agro y las actividades asociadas al agro. Y como genera menos divisas habrá menos divisas para importar en otros sectores”, sostuvo.

Asimismo, el quinto punto es que la reducción en las cosechas “va a seguir generando presiones de precios en la economía porque va a haber menos oferta para poder volcar al mercado. Son múltiples los impactos”, advirtió Mandukián.

El problema de los dólares diferenciales para las economías regionales y el atraso del dólar oficial

En el tramo final de la entrevista, Mandukián se refirió a los pedidos de una cotización del dólar diferencial para las economías regionales, como el dólar malbec (vitivinícola) o el dólar yerba (yerbatera), similares al llamado dólar soja de octubre del 2022. Con respecto al “dólar diferencial para economías regionales”, Mandukián remarcó que el gobierno aceptó en el caso de la soja porque “no tiene tanto impacto en el comercio interno. Pero hacer eso con otros rubros que sí tienen injerencia en el mercado interno, como el vino, puede generar una filtración en los precios de la economía local. Es otra preocupación para el gobierno, pero el margen de maniobra es (mínimo)”, subrayó.

“Detrás de todo eso, el problema está en que el dólar está atrasado en un 25% con respecto a los valores del 2019. Y todos (los actores económicos) se vuelcan al dólar oficial y eso genera mucha demanda”, precisó el economista.

Sin embargo, en un año electoral, en el que el gobierno se juega su continuidad o no, “no va a convalidar una devaluación fuerte y tiene que administrar esa escasez de dólares”, remató Mandukián.

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