El presidente Javier Milei, junto a su ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, avanza con un plan de austeridad y reestructuración del Estado sin precedentes, que apunta a reducir el gasto público y fortalecer las finanzas del país. En 2024, el gobierno ya había recortado el gasto público en un 30%, y para 2025 las medidas se intensifican con un objetivo claro: lograr un superávit fiscal y reducir la deuda externa.
La “motosierra” de Sturzenegger ha sido utilizada como sinónimo de un recorte drástico en secretarías, fideicomisos y fondos nacionales, con un foco en aquellos que se consideran ineficientes o con usos políticos. A principios de enero, el gobierno decidió la disolución de varios fondos, incluyendo el Fondo Fiduciario para la Vivienda Social, el Fondo Fiduciario del Servicio Universal y el Fondo Fiduciario Prodaf. Estas medidas suman a la ya creciente lista de 18 fondos disueltos en el último año.
Además, el Ejecutivo ha reducido drásticamente la cantidad de empleados públicos, con 36,000 puestos eliminados durante 2024, y continúa con un estricto control de nuevos ingresos a la administración pública, implementando la regla del “tres por uno”, donde cada nuevo empleado debe ser justificado por la baja de tres anteriores.
Si bien el gobierno justifica estas decisiones como parte de su estrategia para corregir el déficit fiscal y alcanzar un equilibrio presupuestario, la oposición y sectores sociales cuestionan el impacto de estas políticas sobre las clases medias y más vulnerables. Las jubilaciones y subsidios han sido algunas de las áreas más afectadas, con un recorte del 30% en los primeros meses del 2024.
Pese a las críticas, el presidente Milei y su equipo confían en que este ajuste permitirá reducir la pobreza y generar las condiciones para un crecimiento económico sostenido, al tiempo que logran mejorar el perfil crediticio del país. El año 2025 será crucial para definir el futuro de las políticas económicas del gobierno, en un clima electoral donde el balance entre austeridad y bienestar social será central en el debate.