La ceremonia, que comenzó a
las 16 del viernes, estuvo encabezada por el Jefe del Estado Mayor de la
Armada, José Luis Villán, el subjefe Eduardo Alberto Fondevila Sancet y el
comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la fuerza, Fabián Gerardo
Dángelo, mientras que también asistió el intendente electo de la ciudad,
Guillermo Montenegro.
Villán se refirió a los tripulantes del submarino y dijo que “sin
duda ellos ya están en la historia, el respeto hacia ellos no admite divisiones
y no sabe de desencuentros”.
“Para algunos hechos de la vida simplemente no existen
palabras. Es tan fuerte el impacto en el alma que el silencio se vuelve
irreemplazable y paradójicamente resulta lo más elocuente. Pero es preciso
buscar palabras que nos aproximen a esos acontecimientos, encontrar símbolos
que resalten lo sucedido para honrar a los protagonistas como se lo merecen y
como nosotros necesitamos”, expresó el Jefe de Estado mayor de la fuerza.
En tanto, Villán manifestó: “Coraje, compromiso, vocación,
servicio, profesión, ejemplo, son palabras simples y cada uno de nosotros en su
interior le otorga un valor distinto, pero a pesar de ser siempre un máximo no
alcanza a igualar la magnitud del sentimiento que hoy nos embarga a todos. Hoy
estamos aquí para intentar suplir un silencio con palabras que sabemos
limitadas, con gestos que nunca alcanzan”.
“Sus nombres quedarán grabados en piedra, sus ausencias
estarán permanentemente presente en todo rincón de la Armada”, dijo Millán.
Y concluyó: “Rogamos a Dios
que siempre nos ayude a pensar en qué harían ellos, en cómo lo harían, y que
nos otorgue la fortaleza necesaria para que no se use su recuerdo con fines
espurios y podamos seguir siempre su ejemplo”, manifestó el jefe de la Armada.
Durante el acto, las autoridades de la fuerza realizaron el
descubrimiento de una placa que recuerda a los 44 submarinistas del ARA San
Juan, que perdió contacto a las 7.19 del 15 de noviembre de 2017, ocho horas
después de que su jefe de operaciones informara sobre un principio de incendio
en el tanque de baterías número 3, provocado al parecer por el ingreso de agua
por el sistema de ventilación, mientras trataba de identificar pesqueros
ilegales en medio de un fuerte temporal.
Los familiares directos de los tripulantes recibieron de
parte del jefe de la Armada Argentina, como condecoración, una medalla “Al
Honor Militar”.
Tras las distinciones, se hizo una salva de 21 disparos de
fusil. También se les hizo entrega de una copia de una carta redactada por el
cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, en la que expresó
el sentimiento del Papa Francisco por el hecho.
Los restos del submarino fueron encontrados por el buque
Seabed Constructor, perteneciente a Ocean Infinity, una firma estadounidense
contratada por el gobierno nacional para llevar adelante la búsqueda, con
dispositivos capaces de operar en profundidades de hasta 6.000 metros.
El hallazgo fue comunicado en los primeros minutos del sábado
17 de noviembre por parte de la Armada a las autoridades nacionales, cuando
varios familiares se encontraban en Mar del Plata convocados desde días antes
para un homenaje que encabezó el presidente Mauricio Macri en la Base Naval.
La información oficial detalló luego que el casco se
encontraba “en una sola pieza”, “totalmente deformado, colapsado e implosionado”
y sin “aberturas de consideración”, con partes de la hélice enterradas y restos
de tuberías, cadenas y pedazos de chapas desperdigados en un radio de 80 metros.
Estos indicios reforzaron la hipótesis de una “implosión
cercana al fondo”, producto de la presión a una profundidad superior a los 900
metros.
Tras el hallazgo, se tomaron 67.000 imágenes en alta
definición, que quedaron en manos de la jueza federal Marta Yáñez, a cargo de
la investigación en Caleta Olivia, que busca determinar las causas del
hundimiento y las eventuales responsabilidades penales.
Hasta el momento, la magistrada imputó a siete ex altos jefes
de la Armada, que han sido citados a indagatoria en el marco de una causa
iniciada por “averiguación de delito”, que modificará su carátula cuando
finalicen las declaraciones, según fuentes judiciales.