ZARATE, BUENOS AIRES. Poco antes de que se dicte el veredicto en el juicio que tiene a ocho jóvenes como acusados del homicidio de Fernando Báez Sosa, uno de los imputados solicitó asistencia psicológica. Según fuentes oficiales, en esta oportunidad, fue Enzo Comelli, uno de los dos responsables de asestar el primer golpe en la nuca contra el joven estudiante de Derecho asesinado a golpes el 18 de enero de 2020, en Villa Gesell.
Según publicó La Nación, Comelli solicitó la consulta psicológica en el tramo final del juicio que empezó el mes pasado en la sala de audiencias del Tribunal Oral N° 1, de Dolores, integrado por María Claudia Castro, Emiliano Lázzari y Christian Rabaia, que este lunes dictará la sentencia en el debate oral al que fue sometido Comelli por su presunta responsabilidad en el homicidio de Báez Sosa, junto a Máximo Thomsen, Lucas, Ciro y Luciano Pertossi, Blas Cinalli, Matías Benicelli y Ayrton Viollaz.
Los acusados enfrentan una condena a prisión perpetua si el Tribunal los encuentra culpables, como lo pidieron la fiscalía y los abogados que representan a los padres de Fernando, por el homicidio agravado, por el concurso de dos o más personas y por la alevosía. En tanto, la defensa que encabeza el Dr. Hugo Tomei, solicitó la absolución de todos los acusados. Subsidiariamente, solicitó que el tribunal tenga en cuenta una condena por un delito menos grave como el homicidio en riña o el homicidio simple con dolo eventual. Si los condenaran por homicidio en riña, los rugbiers recuperarían su libertad.
Dos pedidos de asistencia psicológica de dos acusados a días de la sentencia
De acuerdo con el diario nacional, el estado de ansiedad de Comelli ante la proximidad de la sentencia había quedado en evidencia hace quince días cuando los guardiacárceles de la Unidad Penal N° 6 de Dolores, donde los acusados están alojados desde el 1° de enero, secuestraron su celular y el teléfono de Viollaz debido a que habían realizado en las redes sociales manifestaciones de apoyo a su situación procesal y a favor de que no los condenaran.
En tanto, hace dos semanas, Thomsen, señalado por los testigos como el agresor más exaltado y violento y el autor de la amenaza de muerte contra Fernando, había solicitado la asistencia de una psicóloga. Lo solicitó la última semana en la que declararon los testigos en el juicio oral que realiza en su contra por el asesinato de Fernando Báez Sosa.
