En la madrugada del lunes, los policías controlaron la documentación habilitante del bar, ubicado en calle Andrés Breitegert y determinaron que no contaba con la autorización para el expendio de bebidas alcohólicas, que estaban a la venta.
Por disposición del Juez de Paz local se iniciaron las actuaciones correspondientes y se procedió a su clausura, previa notificación de su propietario.