EL SOBERBIO. Los dos policías involucrados en la supuesta persecución mortal que se registró el pasado miércoles, fueron detenidos en las últimas horas, tras las declaraciones de dos testigos presenciales del asesinato de Reinaldo Andrade, ante el juez de instrucción 3 de San Vicente, Gerardo Casco.
De acuerdo con un matutino posadeño, los detenidos son un oficial subayudante y de un cabo, que prestan servicios en el Comando El Soberbio. Según las fuentes policiales, mediante “tareas de inteligencia”, los uniformados habrían “perseguido” a un VW Voyage gris en el que iba la víctima, junto a otros dos hombres.
Tras la persecución, que derivó en un siniestro vial, el hombre de 37 años recibió un disparo en el cráneo, por parte de uno de los uniformados. La versión sostenida por los implicados, indica que los que iban dentro del auto en el que iba Andrade, exhibieron armas de fuego.
Sin embargo, esta versión parece caerse o presenta numerosas inconsistencias. Tal es así que el juez Casco, ordenó que las pericias queden a cargo de Gendarmería Nacional. Vale decir, para impedir cualquier maniobra de encubrimiento por parte de la fuerza policial.
Los hechos según el relato oficial de los policías acusados
De acuerdo con datos que trascendieron en las últimas horas, el miércoles a las 18 ambos efectivos se hallaban a bordo de un Ford Focus (propiedad del uniformado de mayor rango) en una estación de servicios de la zona, a la vera de la ruta Costera 2. Según la versión oficial, observaron un Volkswagen gris al que vincularon a supuestos casos de contrabando en la zona.
Ese coche se dirigía a los Saltos del Moconá. Lo persiguieron durante un tramo, hasta que al ingresar a un camino terrado hacia el paraje San Ignacio. Allí, a unos 1.000 metros de la ruta costera 2, se habría cruzado otro vehículo, en este caso un Volkswagen Gol Trend.
Según el reporte policial, este último rodado interceptó al Focus e incluso los colisionó, aparentemente, en forma intencional. En el Gol viajaba la víctima fatal junto a otros dos individuos. Fue allí que, de acuerdo a los uniformados, uno de esos hombres exhibió un arma y apuntó a los efectivos.
Para la familia fue una ejecución
En ese contexto, los efectivos abrieron fuego sobre los ocupantes del Gol y una de las balas ingresó por la zona de la oreja de Andrade, que falleció poco después en el hospital local. Para familiares de la víctima, esto fue una “ejecución” de la policía, y no, como se pretende desde la fuerza, una persecución y enfrentamiento.
Tanto el oficial como el cabo se encuentran detenidos, incomunicados, con sumario administrativo y en situación de disponibilidad. Por el momento el caso se investiga como “homicidio”. No se descarta un agravamiento de la carátula penal contra los policías.
