Los agentes de la Comisaría 19ª revisaron las cámaras de seguridad privadas y reconstruyeron el relato del joven, lo que les permitió descartar la posibilidad de un secuestro real. Durante la jornada del lunes, el análisis de las imágenes y el testimonio del menor llevaron a la conclusión de que no había ocurrido ningún delito.
Este martes a la mañana, tanto la madre como el menor se presentaron en la sede policial para aclarar la situación, confirmando que todo se trató de una travesura del chico. Posteriormente, ampliaron la denuncia para reflejar la veracidad de los hechos.