BUENOS AIRES. Tras largas horas de discusión, bajo un clima de máxima tensión, oficialismo y oposición en la Cámara de Diputados no alcanzaron un acuerdo sobre la modalidad de sesión remota, cuya vigencia venció a principios de Agosto. Por lo que crece el escándalo en una sesión que será impugnada judicialmente por el bloque de Juntos por el Cambio.

Poco antes de las 19 los jefes del interbloque opositor hicieron una conferencia de prensa en la que anunciaron que luego de haber hecho acto de presencia en sus bancas y al no habilitarse el tratamiento propiamente dicho, anticiparon que impugnarían esa sesión remota dispuesta por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. En la sesión estaba previsto tratar proyectos de asistencia al turismo y el aumento de multas para la pesca ilegal.

De acuerdo con Parlamentario, los jefes de bloques y Massa, estuvieron durante más de seis horas reunidos en el Salón Delia Parodi, deliberando sobre la modalidad de las próximas sesiones.

La sesión, que iba a comenzar a las 13, se fue postergando a las 15, a las 16.30, a las 17.30 y a las 18.30. Finalmente arrancó formalmente a las 19.36 de manera remota y envuelta en una polémica que promete tener su escala judicial. Desde JxC entienden que la prórroga del protocolo exige el consenso unánime de todos los bloques.

La oposición impugnará la sesión remota de hoy

“Ingresaremos al recinto a impugnar la sesión. Porque el consenso es el no disenso y hay 116 diputados de Juntos por el Cambio diciendo que a este método que no”, enfatizó Mario Negri, jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, según publicó La Nación. Mientras el Frente de Todos insiste en prorrogar por 30 días el protocolo que habilita el funcionamiento virtual de las comisiones y de las sesiones.

Sin embargo, Juntos por el Cambio rechaza darle una carta blanca al oficialismo para debatan de forma remota, el controvertido proyecto de reforma judicial. Para ello movilizó a los legisladores desde sus provincias y reclamar que las sesiones sean presenciales. Este proyecto que, para la oposición, busca garantizar la impunidad a Cristina Kirchner y ex funcionarios K, ya tiene media sanción en el Senado.

Si permiten las sesiones virtuales, el oficialismo podría desplegar alguna jugada política para asegurarse un quórum y una votación que es, en principio, muy reñida en el marco de la Reforma Judicial. Por esto, JxC sienta precedente al impugnar una sesión remota que no fue consensuada con todos los bloques.