BUENOS AIRES. La Oficina Anticorrupción (OA) quedó involucrada en la oleada de recambios en el Gabinete nacional, durante los últimos días del 2022. Uno de los salientes es el fiscal Félix Crous, quien había asumido en el organismo, durante el gobierno del Frente de Todos. Su dimisión fue aceptada por el Presidente Alberto Fernández, según consigna el Boletín Oficial.
Según publicó La Nación, en el entorno de Crous explicaron que la razón de su renuncia es que se aproxima un nuevo vencimiento de su licencia como fiscal en la oficina de enlace legislativo de la Procuración General de la Nación. Además, el fiscal atravesó problemas de salud que lo llevaron a estar internado en más de una ocasión, señalaron las fuentes.
Sin embargo, el dato saliente en lo que refiere a la gestión de la OA en el ámbito de los expedientes por corrupción, Crous se abocó a reducir al mínimo la función del organismo como querellante en las causas judiciales por corrupción, especialmente en los expedientes que involucran a Cristina Kirchner. Casualmente, Crous fue uno de los referentes de la agrupación kirchnerista “Justicia Legítima”.
La OA dejó de ser querellante en las causas contra Cristina Kirchner y sus hijos
Así pues, con su arribo al frente de la OA, el organismo mostró un giro de 180 grados en las causas Hotesur y Los Sauces, que fueron cerradas el año pasado sin que se hiciera el juicio oral y público.
De hecho, la oficina que condujo Crous hasta este viernes, renunció a su rol como querellante en esas causas, en las que había intervenido con énfasis durante el gobierno de Mauricio Macri -mientras la titular era Laura Alonso. En esa causa estaban procesados Máximo y Florencia Kirchner, los hijos de la Vicepresidente.
Por entonces la OA bajo la gestión de Crous argumentó que, como se investigaba el delito de lavado de dinero, correspondía que interviniera la Unidad de Información Financiera (UIF). También justificaron desde el organismo haber desistido por “falta de recursos humanos”.
Luego la UIF, en su rol de querellante, también comandada por otro kirchnerista, Juan Carlos Otero, pidió el cierre de las causas.
En la misma línea, la Oficina Anticorrupción también renunció a su rol como querellante en pleno desarrollo del juicio oral por la causa Vialidad, justo antes de que comenzaran los alegatos acusatorios.
Con esta última decisión, Crous tomó un rumbo distinto del que había señalado cuando asumió. “Las querellas que están en juicio seguirán adelante”, había dicho al asumir, allá por 2020.
El pretendido rol de prevención de la OA bajo la gestión de Crous
Con respecto a la gestión preventiva, una fuente que acompañó la gestión de Crous destacó una serie de iniciativas y acciones que hizo el organismo desde su rol preventivo. Entre ellas nombró el haber desarrollado el Registro de Integridad y Transparencia para Empresas y Entidades (RITE), y el haber trabajado con distintos ministerios y empresas públicas en desarrollar sus áreas de integridad.
Entre ese supuesto rol preventivo, la fuente destacó las auditorías de la OA a las gestiones a posteriori, un rol que le compete a la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) y no a la OA. También remarcó que la OA presentó este año un nuevo proyecto de Ley de Ética Pública, que actualmente se encuentra bajo estudio de la Secretaría Legal y Técnica.
