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Lula le pide a Dios que se revise su condena

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El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva admitió hoy que le “pide a Dios” que el Supremo Tribunal Federal revise las pruebas por las cuales fue condenado en dos instancias a 14 años de prisión en la Operación Lava Jato, para poder así ser candidato en las elecciones de octubre.

Lula le pide a Dios que se revise su condena

[vc_row][vc_column][vc_column_text]El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva admitió hoy que le “pide a Dios” que el Supremo Tribunal Federal revise las pruebas por las cuales fue condenado en dos instancias a 14 años de prisión en la Operación Lava Jato, para poder así ser candidato en las elecciones de octubre.[/vc_column_text][vc_single_image image=”165246″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]Esta fue la primera reacción de Lula ante la decisión tomada ayer por la máxima corte de prohibir detenerlo hasta la audiencia del 4 de abril, cuando el tribunal se reunirá para analizar un habeas corpus presentado por el ex presidente para evitar la cárcel.

“Le pido a Dios que la suprema corte analice el mérito de mi causa, analice las pruebas las acusaciones, las pruebas de la defensa, porque si ellos tienen medio delito en contra de mí yo estoy fuera de la política, y encima puedo ganar en primera vuelta”, dijo Lula.

El líder del Partido de los Trabajadores (PT) habló con Radio Condá, de la ciudad de Chapecó, estado de Santa Catarina, en el marco de su caravana proselitista por el sur del país, mientras su situación judicial se debate entre la libertad y la ejecución de su condena.

El ex mandatario ganó oxígeno en su situación anoche, cuando el Supremo Tribunal Federal determinó congelar su situación mediante una medida cautelar, que impide la ejecución de una condena que el lunes debe determinar la cámara de apelaciones de Porto Alegre.

El 24 de enero el tribunal regional 4 de Porto Alegre confirmó la sentencia de primera instancia del juez Sérgio Moro contra Lula y lo sentenció a 12 años y un mes de prisión efectiva en base a una jurisprudencia de 2016 de la corte.

Es por eso que Lula presentó un habeas corpus para que la corte máxima discuta si mantiene esa jurisprudencia -que lo llevará a la cárcel- o mantenga lo escrito en la Constitución, que nadie puede ir preso hasta que se agoten todas las instancias de la justicia.

“Si yo puedo ser candidato, tengo grandes chances de ganar en la primera vuelta (del 7 de octubre). Quieren evitar que vuelva a ser presidente con mentiras en contra de mi conducta”, dijo el ex presidente, favorito en las encuestas.

Lula dijo que es “toda mentira” la causa judicial por la que fue condenado, es decir, haber recibido un apartamento en el balneario de Guarujá por parte de la empresa OAS como parte de los pagos de sobornos de la constructora al PT.

“Soy víctima de una mentira, y eso quedará en la historia del pueblo brasileño. La policía federal mintió, los fiscales tomaron un informe mentiroso e hicieron una acusación mentirosa ante el juez Moro, que dio una sentencia mentirosa ratificada por un tribunal que emitió otra mentira”, subrayó Lula.

El habeas corpus deja en suspenso la orden de prisión que a partir del lunes debe seguramente emitir tribunal de Porto Alegre.

La corte suprema, ayer, votó para aceptar el tratamiento del habeas corpus y la decisión del 4 de abril debe ser clave para decenas de condenados en segunda instancia que ya fueron arrestados en base a esta jurisprudencia de 2016.

Según cuentas de dirigentes del PT, Lula cuenta con 6 de los once votos para evitar ser detenido hasta tanto su sentencia no sea confirmada por una tercera instancia, en caso de que ello ocurra.

De todos modos, la candidatura del ex sindicalista y tornero mecánico dependerá de la justicia electoral, que puede aplicarle la ley de Ficha limpia, que impide presentarse a los candidatos condenados en dos instancias.

Oficialmente, el PT confirma que Lula es su único candidato pero en los últimos tiempos surgieron posibles planes alternativos, como la figura del ex gobernador de Bahía Jacques Wagner y el ex alcalde de San Pablo y ex ministro de Educación Fernando Haddad.[/vc_column_text][vc_column_text]


Télam / vm.

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