
El presidente, Alberto Fernández, anunció este viernes por la noche la siguiente fase de restricciones por la pandemia en la que todo el país, que quedará bajo el esquema de distanciamiento social hasta el 20 de diciembre próximo, con las excepciones de San Carlos de Bariloche (Río Negro) y el departamento de Deseado (Santa Cruz), que permanecerán en aislamiento.
Tras anunciar que solamente las localidades rionegrina de Bariloche y el departamento santacruceña de Deseado se mantendrán hasta el 20 del mes próximo el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (Aspo), Fernández manifestó que en las provincias de Corrientes y Chaco se ve “un crecimiento de casos, producto de una mayor cantidad de testeos”.
No obstante, aclaró que en esos distritos, la ocupación en las unidades de terapia intensiva “sigue siendo muy baja”.
Asimismo, describió que se ve una “clara mejoría en el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) y a nivel nacional” sobre la cantidad de contagios por el Covid-19, y graficó que en hubo una disminución de contagios del 30 por ciento “desde la semana 35 (desde el comienzo de la emergencia sanitaria) en adelante y una caída en la cantidad de fallecimientos”.
No obstante, Fernández alertó que “el problema no ha sido superado” y puso como ejemplo el hemisferio norte, “que sufre una segunda ola con un nivel de contagio alarmante”.
Además, aclaró que de todos modos “el trabajo no ha concluido” y que afirmó que “todavía tenemos por delante un trabajo de cuidado cierto y la pandemia está lejos de haber sido erradicada”.
Respecto a las vacunas, manifestó que espera que durante enero y febrero puedan vacunarse a 10 millones de personas