Recordaron a Ferreyra y Peczak, a 42 años de su asesinato

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Los obereños Pedro Orestes Peczak y Susana Beatriz Ferreyra, fueron recordados este lunes por sus familiares y organizaciones sindicales y políticas al cumplirse 42 años de su asesinato en medio de torturas en la última dictadura militar. Susana fue torturada, quemada y asesinada en el Departamento de Informaciones de la Policia Provincial, por la calle Buenos Aires de Posadas.[/vc_column_text][vc_media_grid grid_id=”vc_gid:1545133662575-f0be13a6-b0ee-4″ include=”215900,215899,215901″][vc_column_text]OBERÁ. Este lunes, familiares de Susana Beatriz Ferreyra, junto a organizaciones sindicales y políticas, recordaron a la docente obereña torturada hasta la muerte en el 16 de diciembre de 1976. Al cumplirse 42 años de su desaparición y muerte, desde la CTA Autónoma recordaron a Ferreyra y también a Pedro Orestes Peczak, de Los Helechos, también secuestrado y asesinado por la última dictadura cívico-militar de Argentina.

“Cuentan sus hermanas, que Susana nació el 16 de agosto de 1948, a las 11,30 hs. Fue la primera hija del matrimonio formado por Irene Ruiz Díaz y Francisco Ferreyra. Luego vendrían dos niñas más. Su infancia y adolescencia transcurrieron en el Barrio Loma Porá de la ciudad de Oberá. A los cinco años ingreso a primer grado en la Escuela Nacional nro 288. Rápidamente se manifestó como una niñita muy capaz, aprendiendo a leer y escribir con facilidad asombrosa. Terminaba sus tareas con rapidez y luego veía qué actividad emprender, situación que a los docentes les costaba sobrellevar”, publicaron desde la CTA A Misiones, a través de las redes sociales.

“Esos años de su infancia estuvieron marcados por hechos políticos importantes. Su padre, obrero y peronista, vivía con pasión cada acontecimiento. El golpe militar de 1955, la explotación y persecución, la nostalgia por el gobierno popular. El peronismo proscripto. Susana leía todo lo que llegaba a sus manos. Era reservada, con una rica vida interior. A los 15 años fue presidente de la Acción Católica de Jóvenes en su ciudad. El futuro parecía el sol que llegaría a borrar tanta injusticia”, indicaron.

“Respetada y valorada por compañeros y profesores, se recibio de Maestra en 1965. Ejercio su profesion en Escuelas Rurales y del Centro de Obera. En 1970 ingreso a la Escuela Superior de Bellas Artes en donde obtuvo el título de Profesora en Dibujo Artístico. Los sucesivos golpes de estado, el asesinato a estudiantes, obreros, intelectuales, la miseria planificada sin pudor, fueron definiendo a la joven docente. Susana se hizo peronista y revolucionaria. Evita, el Viejo, el Che Guevara, los Mártires del Pueblo iban configurando su cielo de estrellas”, precisaron.

“En ese cielo, sueño colectivo, viajo con los compañeros a Ezeiza, el 20 de junio de 1973, a esperar a Perón que volvía después de 18 años de exilio, en un tren que salió de Posadas con 26 vagones. Fue asesora del MAM, Movimiento Agrario de Misiones y militante de la Juventud Peronista. A los 28 años de edad, entrego su juventud, su belleza, su luz. Fue secuestrada en Campo Viera, en casa de un obrero rural”, cuentan desde la CTA Misiones.

“Según cuentan sobrevivientes, Susana fue torturada, quemada y asesinada en el Departamento de Informaciones de la Policía Provincial, por la calle Buenos Aires de Posadas. Su cuerpo fue entregado a sus familiares. En el Certificado de Defunción decía: politraumatismo. El Equipo Argentino de Antropología Forense, EAAF, informo que tenía 16 impactos de bala”, denunciaron desde la entidad sindical en una conocida red social.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]