POSADAS. El próximo martes 16 de agosto se iniciarán las jornadas de debate en el Tribunal Penal Uno de Posadas por el femicidio de Irma Ferreyra Da Rocha (47), que tendrá en el banquillo de los acusados a Alejandro “Porteño” Esteche, de 34 años. Cabe recordar que el brutal femicidio ocurrió el 17 de Diciembre del 2016.
La víctima, una empleada doméstica que vivía junto a sus siete hijos en el barrio Villa Bonita de Garupá, fue violada y empalada con la rama de un árbol que el femicida utilizó para el crimen. Irma fue abandonada en un túnel peatonal de la colectora sur de la autovía ruta 12, con los órganos genitales, digestivos y respiratorios desgarrados.
Según medios locales, está previsto que el juicio se desarrolle a lo largo de 10 jornadas. Hay más de 30 testigos convocados para declarar en este juicio por femicidio. Entre los que están convocados, figuran los médicos que intervinieron durante las horas de agonía que atravesó la víctima. Y las personas que compartieron con ella sus últimas horas y fueron testigos trascendentales para formular la acusación.
En cuanto a Esteche, hasta el momento permanece detenido en la Unidad Penal II de Oberá, imputado por el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante por las circunstancias de su realización, seguido de muerte”. De ser encontrado culpable, recibiría la condena de prisión perpetua.
Críticas a la ex Ministra Tiki Marchesini
En la causa intervino el Juzgado de Instrucción Siete, en su momento a cargo del magistrado Carlos Giménez (ahora integrante del Tribunal Penal 2 de Posadas). Fue el propio Giménez quien en julio de 2018 firmó la elevación a juicio. En noviembre de ese mismo año la medida había sido confirmada por la Cámara de Apelaciones.
Cabe destacar que según denuncian organizaciones políticas de izquierda, la familia de Irma, sus hijas, hijos ni su hermana no pudieron ser querellantes, porque el abogado designado en su momento por la entonces ministra de Derechos Humanos, Lilian “Tiki” Marchesini, no hizo el trámite correspondiente.
Lo que reconstruyeron los investigadores de las últimas horas de Irma
De acuerdo con la investigación, Ferreyra Da Rocha y Esteche se conocieron casualmente durante una fiesta de fin de año que se realizó el 17 de diciembre de 2016 en el predio ferial de “La Economía”, ubicada en cercanías donde antiguamente estaba la Garita del Kilómetro 10, en Garupá.
De allí salieron juntos. Primero se habrían dirigido hasta un terreno baldío y luego hasta un túnel que se forma en el trazado de la autovía de la ruta nacional 12, donde Irma sufrió la brutal violación y las heridas de muerte.
Según un matutino local, los estudios médicos y forenses dictaminaron que la víctima había sido golpeada y abusada sexualmente con un objeto que le provocó daños irreversibles en sus partes íntimas y órganos internos.
Presunta mala praxis
Irma sobrevivió al ataque y fue derivada al hospital Madariaga, donde sufrió y se repuso a cuatro paros cardíacos durante tres cirugías. Pero su cuerpo ya no resistió y terminó falleciendo a unas 30 horas después de su ingreso. La autopsia reveló que murió por la “destrucción severa de órganos vitales, entre ellos perforación de uno de los pulmones”.
La intervención de los médicos, también está bajo la lupa en este caso. Este juicio podría derivar en una discusión que conlleve a acusaciones por mala praxis. Es que horas después del deceso de Irma circuló en redes sociales un video de su ingreso al nosocomio posadeño y recibiendo las primeras atenciones médicas. Esto causó indignación en buen parte de la sociedad misionera y se llegó a iniciar una investigación judicial de oficio para identificar a los médicos que lo hicieron.
Las pruebas contra Esteche
En cuanto a Esteche lo detuvieron días después del crimen, incriminado por varios asistentes a la fiesta mencionada. Señalaron que lo vieron salir del lugar en compañía de la mujer.
Cuando declaró ante el juez Giménez, su declaración causó sorpresa y estupor. Es que dijo que mantuvo relaciones sexuales consentidas con Irma. Y agregó que le introdujo el objeto a pedido de la víctima. Al ver la gravedad de lo que había hecho, “se asustó” y escapó del lugar, dejando abandonada a su suerte a Irma.
Sin embargo, Esteche presentaba lesiones en los nudillos coherentes con el acto de golpear a otra persona. Según el informe forense, esas lesiones eran compatibles con los hematomas que Irma tenían en el rostro. Es decir, habría evidencias físicas contra Esteche, que habría golpeado salvajemente a Irma.
Cabe recordar que, por tratarse de un delito contra la integridad sexual no permite presencia de público general durante las jornadas de testimoniales.
En estos últimos años, hubo numerosas marchas exigiendo justicia por Irma, encabezadas por familiares y allegados de la víctima, y organizaciones sociales y políticas que apoyaron ese reclamo. Por el grado de ensañamiento y el salvaje accionar del autor del crimen, el de Irma Ferreyra Da Rocha, se considera uno de los femicidios más atroces entre los que se concretaron en la provincia.
