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Marisa Ortiz vive en la Chacra 239, está enferma de neumonía y su precaria casa está sumida en la humedad porque se inunda cada vez que llueve.

[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=”106245″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Una familia de la Chacra 239, uno de los barrios periféricos de Posadas, vive inundada cada vez que llueve. La jefa del hogar es María Ortiz, quien comparte una precaria vivienda de madera junto a sus tres hijas, rodeada de barro, pastizales y agua sucia.

María relató que está enferma de neumonía, hace seis años que pide ser relocalizada para mejorar su salud y poder ofrecerle un futuro mejor a sus niñas.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]“Cuando llueve se mojan las camas, las ropas y todo lo que tenemos”, se lamentó la mujer. Además señaló que la asistencia que le brinda el Gobierno en cada lluvia, no es suficiente. “Nos traen un colchón finito y una bolsa de mercadería, pero así no podemos vivir más”, enfatizó al tiempo que pidió una casa digna para mudarse.

“También mi cuñada vive cerca con sus hijas y su casa se inunda. Realizamos muchos reclamos sin obtener solución”, aseveró.

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