Docentes del CEP N° 20 denunciaron públicamente una serie de situaciones de maltrato y violencia psicológica en su lugar de trabajo. A través de una manifestación organizada, los educadores, junto con representantes gremiales, exigieron la renuncia inmediata de la directora de la institución, quien, según los testimonios, estaría al frente de un ambiente laboral tóxico y hostil.

Luisa Beatriz Vásquez, docente del centro, explicó la gravedad de la situación: “Estamos siguiendo los pasos para denunciar el maltrato y violencia que sufrimos docentes y alumnos en el CEP N° 20. No aguantamos más la situación y necesitamos una solución inmediata”, aseguró. Vásquez detalló que las situaciones de violencia psicológica y persecución afectan no solo a los docentes, sino también a los estudiantes, y enfatizó que el único camino posible es apartar a los directivos de sus cargos. “Creemos un documento con pruebas”, añadió, refiriéndose a las evidencias de los abusos.

Por su parte, Nerea Samaniego, otra docente de la institución, recordó que el conflicto no es reciente: “Desde hace mucho tiempo venimos sufriendo maltrato y abuso de poder dentro de la institución y por parte de la directora”, indicó. Según Samaniego, se agotaron todas las instancias de diálogo, incluyendo reuniones con la supervisora del establecimiento, pero la respuesta siempre fue insuficiente. “Hasta el PEI del 12 de noviembre quisimos un diálogo con la directora, pero dijo que se tenía que ir”, relató.

Los docentes también denunciaron que el abuso de poder y el acomodo de familiares y colegas sin título son prácticas recurrentes en la institución, lo que aumenta el malestar entre el personal educativo. “La mayoría de los docentes fuimos jefes de departamento y terminamos renunciando”, comentó Samaniego, quien también expresó el sentimiento de desamparo que prevalece entre los educadores.