Según comentó, el último mes no ha registrado aumentos en los precios del pescado, lo que ha favorecido las ventas. “En el último mes no hubo aumentos, esto favorece a la venta. El problema principal es que hay una escasez de pescado, especialmente de especies de río como el boga, sábalo y surubí. Esto puede deberse a la bajante del río, ya que, en épocas de escasez, se recurre más a pescado de criaderos, pero la situación puede variar dependiendo del nivel del agua”, explicó.

La escasez no afecta a los pescados de mar, que siguen disponibles en variedad. “En lo que respecta a pescado de mar, hay una buena oferta de filetes, espinados y medallones. La variedad está asegurada y no hemos tenido problemas en ese sector”, aseguró.

La demanda de pescado de río ha aumentado debido a su menor disponibilidad, lo que lleva a los clientes a buscar precios en diferentes lugares. “La gente está buscando activamente debido a la escasez. Recorren diferentes puntos para encontrar lo que necesitan y comparar precios”, comentó.

En términos de precios, Alastuay detalla que el filete de pescado de mar, como merluza, salmón blanco, atún y corvina, se mantiene a 6.300 pesos el kilo, con ofertas ocasionales. Por otro lado, el filete de pescado de río, como el dorado, está a 7.300 pesos el kilo, mientras que el filete de armado y de pesca rey se venden a 5.800 pesos el kilo. “Estos precios son los que se mantienen desde el mes pasado, sin incrementos”, añadió.