“En cuestión de movimientos, hubo un incremento del 30% en nuestras ventas durante los últimos tres meses,” señaló. A pesar de este aumento en las ventas, los precios de los productos han mostrado poca variación. “En cuanto a aumentos de productos, no hubo muchas variantes; hubo un incremento de cerca del 5% a 10% en productos seleccionados que venían con retraso. Sin embargo, en materiales más fijos, hemos observado una baja en los precios,” explicó.

Vivero atribuye este repunte a una mayor disposición de la gente a realizar inversiones, lo que está impulsando un mayor movimiento en el mercado. “Estamos notando que la gente está haciendo un poco más de inversiones y que el mercado se está moviendo un poco más. Este momento nos da un alivio, ya que fuimos uno de los sectores más golpeados en este proceso,” indicó.

En cuanto a la flexibilidad en las condiciones de pago, destacó un cambio positivo. “Están flexibilizando las formas de pago de los proveedores, tanto locales como de otras partes del país, lo que ha permitido mejorar los stocks,” afirmó. Aunque el sector todavía no ha vuelto a los niveles de años anteriores, la situación actual es alentadora y no se han registrado quejas significativas.

El aumento del dólar ha tenido un impacto moderado en el sector. “Con el aumento del dólar, no hubo una variante muy grande en los precios. Lo que más se afecta es la parte metalúrgica y el cemento. También, tuvimos una suba abrupta a fin de año que ahora se está midiendo con los costos,” explicó.