“El barrio se encuentra bien gracias a la comisaría que tenemos cerca, pero últimamente estamos enfrentando un aumento en los delitos cometidos por motochorros. Esto ha sido un problema durante los últimos meses, y es muy peligroso tanto para los niños como para las personas mayores”, explicó.

Uno de los problemas más urgentes que menciona es la falta de iluminación adecuada. “No tenemos iluminación suficiente, lo que representa un riesgo constante para quienes necesitan tomar el colectivo temprano. Las lámparas LED que se instalaron hace un tiempo dejaron de funcionar, y se tuvieron que reemplazar por los focos antiguos, que tampoco están en las mejores condiciones”, añadió. La falta de cámaras de seguridad en la zona también agrava la situación, especialmente en la entrada del barrio, que se ha convertido en la zona más peligrosa.

Benítez también destacó la necesidad de una plaza en el barrio. “San Jorge no tiene una plaza propia, sino solo una central, pero hay un predio que actualmente pertenece a EMSA. Ese lugar podría transformarse en una plaza o en un espacio verde para nuestros chicos”, afirmó. Espera que el intendente considere estas necesidades y desarrolle un proyecto para mejorar las instalaciones del barrio.