“Las provincias que producen mamón son Corrientes, Jujuy y Misiones. Hay años en los que la producción supera la demanda, como está ocurriendo este año”, explicó Frank. En estas circunstancias, la cooperativa ha tenido que acopiar hasta 3 millones de kilos de mamón, pero no siempre logra vender todo. Para mitigar los efectos en los productores, se les paga en 2 o 3 cuotas, siempre intentando llegar a un acuerdo para que no abandonen la producción.
Sin embargo, Frank advirtió sobre el riesgo de que los productores decidan cambiar de cultivo, optando por alternativas como la mandioca, el tabaco o la soja. “El problema será para las fábricas el próximo año, porque no habrá suficiente producción. Este año aún queda algo de mamón, pero cuando la demanda aumente, vamos a enfrentar una escasez”, señaló.
También, lamentó los esfuerzos perdidos tras años de trabajo social en la cooperativa, recordando que tanto él como los consejeros y el intendente han dedicado su tiempo sin recibir sueldo, solo por el deseo de contribuir a la comunidad. “Es doloroso ver cómo se pierde este esfuerzo, especialmente cuando afecta a tantas familias”, expresó.
Finalmente, hizo un llamado a las autoridades provinciales para que intervengan y tomen medidas, ya que la situación está afectando no solo a los productores, sino también a la economía local. “El tiempo para vender ya pasó, eso debió haberse hecho en febrero. Ahora, es crucial que la provincia actúe”, concluyó.