
El Ministro de Trabajo, señalado como el garante de la precarización laboral en el Estado provincial, admitió que siguen encontrando niños en los yerbales, pero evitó brindar números y apuntó a los padres que los llevan consigo para mejorar los salarios. En lugar de proponer el fin del trabajo a destajo, Agulla opinó que con las escuelas de jornada extendida, se podría atenuar el problema de la explotación infantil.