Durante su intervención, destacó la alarmante diferencia salarial en el ámbito educativo, afirmando que “el piso para los empleados estatales es de 556 mil pesos, mientras que un maestro recién iniciado gana 500 mil”. Esta desigualdad, según la dirigente, refleja una falta de compromiso por parte del gobierno hacia la educación y sus trabajadores.

En respuesta a esta situación, el frente de trabajadores de la educación en lucha convocó a asambleas sin atención a alumnos en las escuelas para este jueves, como forma de protesta y visibilización de sus demandas. Además, Gurina mencionó una caravana autoconvocada que se llevará a cabo en Candelaria.

“Nos quieren contar que no hay plata debido al ajuste del gobierno nacional, pero hay una esquizofrenia en su discurso: mientras unos ajustan, ellos prestan el voto”, expresó, refiriéndose a la contradicción en las políticas económicas que afectan a los trabajadores.

La dirigente también hizo hincapié en la necesidad de organización y resistencia frente a las condiciones de precarización laboral. “No nos vamos a quedar en casa mientras nos explotan y precarizan”, afirmó.