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Duro reclamo por mala calidad de la comida de la Centralizada

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Organizaciones sociales ligadas al kirchnerismo salieron a reclamar por la merma en las raciones, la mala calidad en los alimentos y el retaceo de carne que viene de la cocina centralizada. Y apuntaron a la responsabilidad de la ministra Dammer.

Duro reclamo por mala calidad de la comida de la Centralizada

POSADAS. Barrios de Pie y referentes de comedores salieron a reclamar por la reducción en las raciones y en la calidad nutricional de los alimentos que provee la Cocina Centralizada del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia. Con pancartas y carteles, estas organizaciones K que forman parte de la Mesa Provincial para instrumentar la Emergencia Alimentaria, denunciaron que, desde hace semanas, la comida de la Centralizada, “está aguachenta”, con poca carne y una reducción en las raciones.  

“Las raciones son pocas y (la comida) muy mala y muy aguada. Ya hicimos varios reclamos”, dijo a MisionesCuatro, Lucía Ferreyra, titular del comedor Hijos del Rey. Según ella, desde el ministerio que preside Benilda Dammer, les dijeron que “tienen cada vez menos insumos”.

“Recibíamos 180 raciones”, dijo Ferreyra, y agregó que, por la mala calidad y la reducción de las raciones, ahora sólo permiten “hasta 30 tuppers porque es lo que podemos llenar. Tenés que decidir quién come y quién no”,se quejó la referente. Viene muy aguada la comida. Nos obligan a tener que salir a buscar donaciones para poder cocinar”, insistió.

Por su parte, la referente de BdP, Noelia González, coincidió con las denuncias de una caída en la calidad y cantidad de la comida de la Centralizada. “Los alimentos llegan, pero en muy poca proporción. Y cuando llegan bien, no son adecuados. La comida de la Centralizada de Santa Rita, es muy aguachenta. Si el Estado está bajando los insumos correspondientes, que pongan a alguien que controle la forma en que se está cocinando. Y si se está usando todos los insumos”, puntualizó.

Según González, la ministra Dammer recibió a referentes de la organización, pero “nos gustaría que (desarrolle) un control más estricto. Y que vea las condiciones en las que están las cocineras de la Centralizada. Conocemos casos en los que cocineras apenas cobran 2 mil pesos. Tienen familia detrás. Y falta higiene (en la Centralizada) y en los comedores”, bramó.

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