Arrúa expresó su preocupación por la imprevisibilidad que generan los cortes de ruta. “La modalidad de reclamos de cortes no te genera previsibilidad, hay vuelos o tours, gente que buscar de terminales”, señaló, destacando cómo estos bloqueos afectan negativamente la logística del turismo. La imposibilidad de tránsito por varias horas es una cuestión crítica. “El impedimento drástico de cinco o seis horas sin dejar que nadie pase”, añadió, contrastando con los cortes anteriores que describió como “tolerables”.

El ministro también mencionó que se está analizando la legalidad de estos cortes de ruta y señaló la falta de apoyo de los gremios a los docentes autoconvocados. “No están gremios acompañando a los autoconvocados”, afirmó, sugiriendo una posible disconformidad con las tácticas empleadas por los manifestantes.

Arrúa insistió en que, aunque comprende la necesidad de los reclamos, la forma en que se están llevando a cabo las protestas es demasiado drástica y perjudicial para el turismo. “Hablo de la modalidad que es muy drástica y perjudica al sector turístico”, comentó, subrayando la importancia de mantener un equilibrio entre la expresión de demandas legítimas y el funcionamiento de la economía regional.

Finalmente, el ministro advirtió sobre el creciente sentido de tensión y violencia asociado con los bloqueos. “Empieza a haber una situación muy álgida y un sentido de violencia que no queremos”, concluyó.