POSADAS. Un especialista en la disciplina del Cardiometabolismo advirtió este martes, que la mitad de la población tiene hábitos sedentarios y que el 40% de los adolescentes en Argentina presentan exceso de peso, lo que implica un incremento grave de riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y trastornos metabólicos.

En diálogo con el Noticiero Central de MisionesCuatro, el Dr. Hugo Sanabria, jefe de la clínica diabetes (ICBA) y jefe del programa de prevención cardiovascular, remarcó la importancia de inculcar hábitos saludables en la población desde temprana edad, para prevenir daños cardiovasculares que no implican únicamente el infarto, sino también, las arritmias y la insuficiencia cardíaca.

Sanabria destacó que desde hace tiempo se conoce de la “relación que hay entre trastornos metabólicos, el exceso de grasa corporal y de azúcar en sangre (diabetes) con los trastornos cardiovasculares. Pero en los últimos 7 años hemos aprendido mucho más e incorporado nuevas herramientas que tratan de reducir ese riesgo cardiovascular asociado a trastornos metabólicos”, enfatizó.

La noción de Cardiometabolismo implica “integrar como los trastornos metabólicos pueden generando patologías cardiológicas. No hablamos sólo de infarto, sino que estos trastornos se asocian a arritmias, la fibrilación auricular y el trastorno del músculo cardíaco que genera insuficiencia cardíaca. No sólo se junta grasa en las arterias que se van tapando, sino que, además, estos trastornos general otras alteraciones en el sistema cardiovascular”, subrayó el especialista.

La predisposición genética no es determinante, si la persona mantiene hábitos saludables

Consultado sobre la predisposición genética a desarrollar patologías cardiometabólicas, Sanabria insistió en que es clave lograr un ambiente favorable, independientemente de la susceptibilidad genética. “Personas con mayor predisposición genética, pero si están en un entorno saludable, no desarrollan complicaciones. En cambio, personas con la misma predisposición con exceso calórico y poca actividad física, favorecen a que aparezcan factores de riesgo más tempranamente que llevan al daño cardiovascular. Hay un factor genético que puede generar predisposición, pero la clave es mejorar nuestro medioambiente”, precisó.

En esta línea, Sanabria abogó por desarrollar un plan alimentario saludable y sobre la importancia de la actividad física, al tiempo que insistió en inculcar tempranamente, hábitos saludables.

Al respecto, el médico reveló que “en Argentina 4 de cada 10 adolescente ya tienen exceso de peso. Muchos dejan de hacer actividad física, consumen pocas verduras y muchas bebidas azucaradas y ese exceso de grasas que va generando puede ir generando daño. Estudios que muestran que a los 20 o 30 años de edad de chicos que habían tenido obesidad, ya tienen grasa en las arterias. Hay que actuar precozmente, inculcando en la niñez y adolescencia, hábitos saludables”, ponderó Sanabria.

“A largo plazo el uso de bebidas con edulcorantes, no reduce el peso ni protege desde el punto de vista cardiovascular”

Respecto de la ley de Etiquetado Frontal, Sanabria explicó que “toda acción que intenten ayudarnos a tomar conciencia sobre la importancia de una adecuada alimentación, es bienvenida. El etiquetado frontal es parte de eso, pero no nos podemos quedar sólo con eso. Hay que sumar otras acciones, como tener entornos saludables de alimentación en nuestras escuelas”, sostuvo.

“El exceso de peso a largo plazo está asociado a mayores riesgos de cáncer, enfermedades respiratorias, dificultades a nivel muscular, articular y hepático”, advirtió el médico, apuntando a que los hábitos poco saludables, afectan a la salud “más allá de lo cardiovascular”.

Consultado al respecto, Sanabria se sumó a las críticas al consumo de edulcorantes, en algún tiempo presentados como un producto que permitía la reducción del peso. “A largo plazo el uso de bebidas con edulcorantes, no reduce el peso ni protege desde el punto de vista cardiovascular. (Asimismo) el hecho de mantener un dulzor muy alto en nuestros alimentos y bebidas, conlleva a un incremento calórico. Tener una alimentación (azucarada) dispara otros mecanismos en los que incorporamos otros alimentos que termina contrabalanceando el efecto (de los edulcorantes que carecen de calorías)”, explicó el especialista.

Y amplió al respecto: “Los edulcorantes alteran nuestra flora intestinal y hacen predominar bacterias (en el sistema digestivo) que no nos ayudan a estar más sanos”  

“La mitad de la población es sedentaria, se mueve menos de 150 minutos por semana”

En el tramo final de la entrevista, Sanabria se refirió a la importancia de la actividad física y reveló un dato alarmante sobre el sedentarismo en la actualidad. “La actividad física sostenida en el tiempo es capaz de reducir en un 20 o 30% la posibilidad de reducir alguna enfermedad cardiovascular”, comentó el médico. Y añadió: “La mitad de la población es sedentaria, se mueve menos de 150 minutos por semana”

“Caminar es una de las grandes acciones, todo suma. Deberíamos hacer al menos 50 minutos de actividad física, tres veces por semana. Y no hablamos de correr 5 kilómetros todos los días, simplemente con caminar 30 minutos por día, logramos salir de ese estado de sedentarismo y tener un efecto cardioprotector”, concluyó el médico.