Provinciales

Fallo histórico: condenaron a Ramón Da Silva por el transfemicidio de Evelyn Rojas

cargando anuncio

El acusado y ex pareja de la víctima recibió la pena máxima prevista por el código penal, es decir, prisión perpetua por el asesinato agravado por el vínculo, odio a la identidad de género, su expresión y por femicidio.

Fallo histórico: condenaron a Ramón Da Silva por el transfemicidio de Evelyn Rojas

POSADAS. Luego de seis jornadas de debate en el juicio oral y público llevado a cabo en el Tribunal Penal Uno de Posadas, este jueves los jueces condenaron a Ramón Da Silva a la pena de prisión perpetua por ser penalmente responsable del delito de homicidio calificado por el vínculo, odio a la identidad de género, su expresión y por femicidio de Evelyn Rojas (26) .

Según publicó El Destape, la audiencia final del juicio comenzó a las 8.30 y concluyó cerca del mediodía. Entonces, el Tribunal compuesto por Viviana Cukla (presidente), Ángel Dejesus Cardozo y Marcela Leiva como subrogante, dictaron sentencia y dispusieron cadena perpetua hacia el único acusado del crimen de odio contra la joven trans Evelyn Rojas, asesinada el 27 de Octubre del 2016.

Se trata de un fallo histórico en Misiones dado que por primera vez, se lleva adelante un proceso judicial bajo la carátula de “transfemicidio”. La audiencia se realizó a sala llena y con masivas manifestaciones de apoyo de organizaciones feministas y LGBTQ+.

A seis años del asesinato de la mujer trans, esta tarde se prosiguió en el juico con la lectura de los resultados de una pericia psicológica que se le había realizado a Da Silva. Además, se leyeron los alegatos en los que la querella y la fiscalía pidieron prisión perpetua para el acusad, pese a que, para la defensa, el femicida era inimputable.

La primera sentencia por transfemicidio en la historia de Misiones

Este jueves, el Tribunal Penal Uno consideró que fue probado que Da Silva mató a golpes a la joven posadeña valiéndose de su condición de pareja, por odio a su identidad de género y femicidio. Asimismo, los jueces consideraron un cuarto agravante, la alevosía con la que actúo el asesino.

De esta forma los jueces adhirieron a la solicitud tanto de la querella, comandada por la letrada Florencia González y el Ministerio Público Fiscal, representado por Martín Rau. Un rato antes el abogado defensor, Mario Ramírez, había requerido que a su cliente se lo declarara inimputable. Ese pedido fue desestimado por los jueces, que antes habían recibido el resultado de las pericias psicológicas. Según González, los exámenes descartaron que el acusado no fuera conciente de las consecuencias de sus actos.

“Los criminales movidos por el odio no son enfermos, el señor Da Silva es una persona cuerda, tiene conocimiento de lo que hizo. Las pericias demostraron que no es enfermo, las pericias también demostraron que no tiene empatía, para el imputado Evelyn era un objeto”, sostuvo la letrada frente al Tribunal.

Lo que sostuvo Da Silva en el juicio

Por su parte, el femicida negó su responsabilidad. Y para referirse a quien fuera su pareja, expresó: “un travesti se viste de mujer y un transexual es hombre como yo”. En esa línea, tampoco negó la relación amorosa que mantuvo con la víctima. “Éramos pareja con Evelyn pero nunca fui a su casa”, sostuvo.

En cuanto a los hechos por los cuales fue imputado, Da Silva negó haber estado con la víctima aquella madrugada o, al menos no recordarlo, debido a su “mal estado”, al referirse al consumo de alcohol y estupefacientes. “Cuando murió Evelyn yo no estaba con ella, le vi unas noches antes. No recuerdo bien porque yo consumía floripan, una hoja que se le pone en el mate. También fumaba mucha marihuana”, sostuvo.

Sin embargo, Da silva incurrió en varias contradicciones respecto de cómo se enteró de la muerte de su pareja. Como señaló González a MisionesCuatro este miércoles, el acusado en un primer momento dijo haberse enterado por una amiga de la víctima, otra trans que vive en situación de prostitución, a quien Da Silva conocía. Pero más adelante, hacia el final de la indagatoria, dijo que enteró cuando los integrantes de la Brigada de Investigaciones lo detuvieron.

De acuerdo con la abogada querellante, Da Silva le dijo a un hombre religioso en San Vicente, cuando estaba prófugo, que había huido de Posadas porque había muerto una persona y él sentía miedo. Y cuando la abogada González repreguntó sobre los motivos de ese temor, Da Silva confesó que había estado con la víctima.

El transfemicidio de Evelyn Rojas

El asesinato de Evelyn fue cometido durante la tarde del jueves 27 de octubre de 2016, en la estación abandonada El Refugio, ubicada en las avenidas Uruguay y Buchardo de la capital misionera. La joven que vivía como trabajadora sexual, fue encontrada en una fosa dentro del predio con evidentes signos de violencia en el rostro, totalmente desfigurada. La mataron a golpes pero además, la autopsia determinó que estaba severamente intoxicada con alcohol. Hecho este que la colocaba en situación de indefensión frente al agresor.

Según las pericias sobre el cuerpo de Evelyn, la joven falleció a causa de un “traumatismo de cráneo gravísimo, con fractura de base de cráneo, concomitantemente, policontusiones múltiples, con excoriaciones y hematomas, en instancia vital, con traumatismos maxilofacial severo, en instancia vital, motivo que lleva al óbito”.

La testigo determinante para esclarecer el crimen

Una conocida que fue a buscarla para llevarle comida la vio tirada en el lugar. Fue Ignacia Galeano (50) una testigo clave en la investigación y el juicio. No solamente por ser la primera persona en tomar contacto con la escena, sino por haber estado con Evelyn horas antes del transfemicidio.

El día previo, 26 de Octubre, Galeano encontró a Evelyn en estado de ebriedad y vio que Da Silva “trajo otro vino”. “Entonces él le levantó al hombro y le trajo para acá (por la estación abandonada). Yo miré, vigilé y entró acá”, agregó Galeano por entonces.

Con estas y otras pruebas, Da Silva pasó a ser el único sospechoso del caso. Sin embargo, encontrarlo no fue fácil para la Dirección de Homicidios de la Policía de Misiones. Es que el acusado no tenía lugar fijo de residencia, usaba varios apodos -Junior, Ramoncito o Polaquito- y no tenía cercanos o conocidos.

De acuerdo con lo que reveló la abogada querellante, en la escena del crimen, los investigadores hallaron ADN de sólo dos personas: la víctima y el acusado.

Comentarios