OBERÁ. Desde la municipalidad precisaron que en la Capital del Monte unas tres mil familias viven en asentamientos irregulares. El dato se suelta de un informe del registro nacional de barrios populares, en el marco de un plan de regulación.
Matías Frick, responsable de la Oficina de Tierras de la municipalidad, explicó a medios locales que buscan regularizar la situación por medio de ordenanzas.
El Funcionario comentó que la mayoría de estos asentamientos “no cuentan con servicios básicos”, pero para regularizar la situación necesitan de ordenanzas. Además, las familias deberán cumplir ciertos requisitos para poder concretar el trámite.