La obra es una solución moderna y segura a ese sector de la RP N° 7 ya que el antiguo puente había sido construido en la década de 1960. El nuevo puente tiene veredas peatonales de ambos lados, sumando mejores condiciones de circulación para los peatones.
Algunos puntos a destacar de los trabajos ejecutados permiten tomar dimensión de la inversión de recursos materiales y tiempo empleados. Por ejemplo, se llevó adelante la demolición de la estructura existente mediante voladura controlada, y luego el posterior retiro de materiales para su disposición final.