APÓSTOLES. La situación económica actual sigue generando incertidumbre en diversos sectores, y el rubro de comercio no es la excepción. En una entrevista con el programa Otro Día Más de Radio Social Club, el presidente de la Cámara de Comercio de Apóstoles, Fernando Ostapchuk, habló sobre las dificultades que enfrentan los comerciantes en su día a día.

Uno de los principales problemas que destacó el comerciante es la inestabilidad de los precios. Según manifestó, “no hay una fórmula de preparase. Los precios cambian día a día”. Además, la disparada del dólar genera preocupación en el sector, ya que su aumento se traslada directamente al costo de la mercadería.

Esta situación de incertidumbre también está afectando a la demanda de bienes y servicios. Según Ostapchuk, “lo más notorio es que se deja el consumo de cosas de lujo”. En el rubro de la construcción, por ejemplo, se han cortado las ventas debido a la falta de precios de referencia.

Por otro lado, el aumento en el costo de los fletes también está impactando en el precio final de la mercadería, lo que genera aún más dificultades para los comerciantes. En el rubro de la electrónica, por ejemplo, no se manejan con listas de precios, debido a los constantes aumentos en los costos de los proveedores.

Según Ostapchuk, no hay una fórmula única para manejar los precios, ya que cada rubro se maneja de diferentes maneras. Sin embargo, destacó la importancia de que los consumidores comprendan la situación de los comerciantes: “El consumidor se enoja, pero debe ponerse en el lugar de los comerciantes. Cuando repones la mercadería tiene otro valor y ya perdiste”.

El rubro lácteo es uno de los más afectados por los aumentos, con un incremento del 9%. Además, se están registrando faltantes de mercaderías en supermercados y negocios más chicos. En este sentido, Ostapchuk destacó la falta de harina, azúcar y otros productos básicos, y se preguntó si los proveedores están cubriéndose y enviando en menor cantidad.

En definitiva, la situación económica actual sigue siendo compleja y difícil de prever. Según Ostapchuk, “esta época es peor que la de Alfonsín y la del 2001”.