POSADAS. La joven de 21 años, atacada sexualmente en su departamento ubicado en la avenida Lavalle, el pasado 5 de diciembre, solicitó junto a su familia mediante un abogado, constituirse como querellante particular de la causa, que tiene como único acusado a Alejandro N. de 26 años.

El joven-quien ya tiene antecedentes policiales-se presentó ante la justicia, no declaró y quedó imputado por el delito femicidio en grado de tentativa y delito contra la integridad sexual.

De esta manera, buscan formar parte del proceso para poder tener acceso al expediente y pedir pruebas y formar parte de las audiencias testimoniales, trámite al que las autoridades del Juzgado de Instrucción Siete de Posadas, a cargo del juez Miguel Mattos, dieron curso.

Fuentes cercanas al expediente señalaron que las partes fueron notificadas de la solicitud formulada por el abogado que representa a la víctima y si no hay planteos u oposición serán aceptados. En los próximos días podría haber novedades al respecto.

En el caso del acusado, seguirá con su coartada de una práctica sexual sadomasoquista para explicar el hecho de que fue encontrado por la propia policía asfixiando a la joven encima de ella, solamente con el torso cubierto. Además de los signos de violencia que se detectaron en el cuerpo de la víctima.

Durante esta semana, testigos del hecho, comparecieron al Juzgado, entre los que se encuentran policías, vecinos y otros, que contaron lo sucedido la madrugada del domingo 5 de diciembre. Según trascendió, esos relatos no surgió nada distinto y nuevo de lo que ya se sabía.

El hecho

Todo pasó en la madrugada del domingo 5 de diciembre en un departamento ubicado en avenida Lavalle casi Centenario. Las primeras versiones indicaron que la víctima fue rescatada por la policía, gracias a la intervención de los vecinos que alertaron al 911 luego de escuchar gritos en el edificio.

Según la información compartida por el parte policial, cuando los efectivos pudieron ingresar al departamento, hallaron a la joven desnuda, amordazada y casi asfixiada junto a su agresor, de 26 años, que fue reducido en el lugar.

Mediante maniobras de RCP (Reanimación Cardio Pulmonar), lograron reanimar a la víctima, quien luego pudo afirmar que había sido abusada sexualmente. La chica debió ser trasladada de urgencia al Hospital Madariaga donde está siendo asistida.