POSADAS. A casi un mes de lo sucedido, la investigación por la agresión a Manuel Sánchez continúa en marcha y el lunes se realizará la pericia balística en base al arma y las municiones incautadas. Recientemente se confirmó que el revólver pertenece al padre de Santiago Negrete.
El procedimiento se realizará ante la presencia de los correspondientes testigos y será supervisada por el magistrado Juan Manuel Monte, titular del Juzgado de Instrucción Dos de Posadas, entras otras autoridades judiciales.
El objetivo de la pericia es, en primer lugar, comprobar si el arma calibre 22 incautada como elemento de prueba está apta para disparar. En segundo término, establecer su compatibilidad con las municiones secuestradas, una de ellas extraída del rostro de la víctima tras una cirugía realizada recientemente.
Otro elemento que ya fue elevado al juzgado interviniente es un informe preliminar sobre el peritaje telefónico en el cual se accedió a parte de los chats entre los implicados y en donde -en principio- no se observaría nada de importancia para la causa.
Por último, a comienzos de la semana próxima podría darse lugar al pedido de los letrados Pedro Hurtado y José Luis Rey para constituirse como querellantes particulares en la causa en representación de la familia la víctima, Manuel Sánchez (19), que continúa con su recuperación en su casa.
El caso
El hecho se registró el 13 de abril a la madrugada, mientras Manuel Sánchez y Santiago Negrete, circulaban en el automóvil Volkswagen Voyage del primero. No eran amigos, si conocidos, de acuerdo a las declaraciones.
Allí, Sánchez fue agredido con dos disparos, uno de ellos quedó alojado en su pómulo sin representar riesgo, pero luego fue perseguido por la calle, golpeado y también apuñalado en diversas partes. Casi toda la escena fue advertida por algunos testigos, principalmente una enfermera que auxilió a la víctima.
Luego de la llegada de la ambulancia, Sánchez fue socorrido y quedó internado algunos días, mientras que Negrete quedó detenido y está a disposición del Juzgado de Instrucción Dos. Cuando se presentó ante la justicia se negó a declarar.
