OBERÁ. En la tarde de este martes el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria en el conflicto que, por motivos salariales, se desató entre la municipalidad de Oberá y los empleados comunales adheridos a los gremios ATE y UPCN. De modo tal que los trabajadores acataron la medida y levantaron el paro que habían comenzado en la mañana del mismo martes por tiempo indeterminado.
Según la resolución, ambas partes, comuna y sindicatos, deberán presentarse este jueves a la mañana en la sede local que el ministerio tiene en la avenida Sarmiento de Oberá. Y el municipio no podrá tomar medidas contra los trabajadores que protestaron.
Durante todo el martes un nutrido grupo de trabajadores mantuvo cortados los accesos a la cantera municipal, en la avenida José Ingenieros. Y desde la gestión del alcalde renovador Carlos Fernández comunicaron que la comuna recurrió a la justicia por verse afectados los servicios de obras públicas, específicamente, la recolección de residuos y el reparto de agua potable.
Los gremios reclaman un 15% de aumento del salario básico y rechazaron el ofrecimiento del estado comunal, de otorgarles dos bonos de 2.500 pesos (que no impacta en el básico). Ahora habrá que esperar si hay acuerdo o no en la reunión de mañana a la mañana.